Mundo de nuestra fantasia

Introducción

Hola, soy Angel. Tengo quince años y... bueno mi vida es bastante... digamos aburrida. Mis hobbies... también son aburridos y normales. Me gusta ver películas (mi género preferido és el de ciencia ficción), patinar (aunque ya no lo haga frecuentemente), y dibujar.
Se podría decir que soy una persona solitaria, no tengo amigos, bueno, tengo uno, pero nada más. Ese es Nicolau, tiene la misma edad que yo y vamos al mismo instituto. Él és la única persona que se preocupa por mí y me ayuda mucho, psicologicamente y academicamente.

Físicamente... soy alto, y no hago mucho deporte que digamos (solo el que mencioné anteriormente), mi complexión física es normal, diría que el promedio. Y una de las cosas que me genera problemas es mi piel, soy negro, y al parecer a mucha gente no le agrada eso, al igual que muchos de mis compañeros.

En unos días empezaré cuarto de la ESO, la verdad es que no estoy muy preparado para ello, en primer lugar, Nicolau ya no va a la misma clase que yo, por lo que seguramente me vea obligado a hablar con gente nueva, y esa idea no me entusiasma mucho. Como si no fuera poco, entre los alumnos vi los nombres de unos cuantos con los que no me llevo bién...

No puedo hacer nada más que esperar a ver que pasará, espero que vaya bién.

[Una semana más tarde]

- ¡Hey!

- ¿Eh? ¡Oh Hola!

- Hablamos luego que ya va a sonar el timbre - dijo Nicolau apurado-.

Yo también apuré el paso para no llegar tarde.

Llegué a la puerta de mi clase. "C"

No podía girar la manilla, me daba pánico pensar en la gente a la que me encontraría ahí.

- ¿Vas a entrar? - Dijo una voz detrás mío -.

- Oh lo siento - Me aparté girándome y vi aun chico de mi misma estatura-.

- Gracias - Tomó el pomo - ¿Tú no entras?

- Sí...

El chico abrió la puerta dejando ver a los demás alumnos dentro del aula. Entramos, y el profesor nos indicó nuestro sitio asignado al lado de las ventanas . Nos sentamos juntos.

- ¿Qué casualidad no crees? - Dijo sonriendo

- Sí... - Solté timidamente-.

La clase prosiguió de manera normal, nos estabamos presentando, empezaron por el final por lo que aún no llegaba mi turno, encontré extraño el hecho de que no me sentía nada incómodo, diría que era por mis compañeros de sitio, fueron muy simpáticos conmigo; el chico con el que me sentaba se llama Adrián, el de enfrente Victor, y al lado suyo Ayoub.

Victor es un chico de estatura promedio, diría que 1'75, tenía el pelo castaño largo que estaba atado en una coleta. Ayoub tenía mas o menos la misma estatura que Victor pero tenía el pelo negro corto. No puedo decir mucho de ellos pero ambos eran muy amigables y me hicieron sentir cómodo

[ Al salir de la escuela ]

Llegué a casa, todo estaba silencioso, no había nadie en casa. Me dirigí a mi habitación, iba a cambiarme, pero decidí salir a dar un paseo para relajarme.
Fui a la montaña, me gustaba estar ahí, me ayudaba a relajarme y a pensar. Miré el reloj "18:35" "entro de poco se hará de noche" pensé, y me senté entre las raices de un gran arbol que había allí.

Se hacía de noche pero no quería irme a casa, estaba muy cómodo. Volví a mirar el reloj "20:03", me levanté y me adentré en el bosque, a esas horas acostumbraba a haber luciernagas en el lago, es precioso. Me estaba acercando al lago pero empecé a sentir un pequeño dolor en el ojo, ese, se iba intensificando a medida que me acercaba al lago hasta que de repente pasó algo inimaginable.