Había una vez, en un lugar muy lejano, un reino escondido en las montañas, un reino gobernado con amor. El rey y la reina habían tenido dos hijos, un niño y una niña, una de las empleadas de la casa amaba en secreto al rey, razón por la cual sentía envidia de la reina y sus dos hijos.
En un acto desesperado por llamar la atención del rey, se robó la hija menor, dejando a ambos gobernantes consternados, la mujer se llevó a la niña a un reino vecino, en donde fue criada como su hija.
Tras la partida de la menor el reino se sumió en total oscuridad, los gobernantes limitaban el acceso al palacio para proteger a su hijo, los habitantes comenzaron a darse cuenta del cambio, pero no había nada que ellos pudieran hacer, pues la pequeña fue declarada como muerta.
Veintitrés años después, la princesa se encuentra sirviendo café en su ciudad natal.
Camino de un lado al otro atendiendo pedidos, preparando cafés y entregándolos, al notar que ya no hay mucha gente en el lugar me tomo el lujo de sentarme un rato en la barra, las pocas personas que están en el lugar se toman su tiempo para consumir sus alimentos, apenas ha pasado medio día, pero siento que mi turno ha sido eterno. Solo estoy yo y Sonia que se fue a la cocina con su novio para enseñarle el nuevo platillo que se ha inventado.
Tengo que seguir buscando trabajo, siento que, para mi compañero de cuarto, Emilio, soy un parasito. Camino hacia el área de los casilleros para tomar mi mochila y continuar con mi búsqueda infructuosa de trabajo. Al abrir la puerta veo a Sonia empotrada contra los casilleros mientras se ve que le han dado duro. Ambos tienen la respiración agitada.
Aún permanecen en su burbuja de placer post orgasmo ya que no se han dado cuenta que he entrado, diablos, ya quisiera yo que alguien me empotrara así en una pared, carraspeo un poco mi garganta para llamar su atención.
-Cierren la maldita puerta – digo desviando mi mirada hacia uno de los casilleros que está al lado, lo abro para disimular un poco mi vergüenza.
- Lo siento, no sabía que ibas a entrar – escucho como los pies de Sonia tocan el suelo volteo a verlos, Sonia está acomodándose la falda del uniforme, mientras que Thiago está acomodándose el pantalón. Caigo en cuenta de que el casillero en el que están es el mío.
- ¿Por qué justo en mi casillero? Hay muchos casilleros aquí – veo que mi jefa me sonríe mientras su novio evita mirarme. Thiago ya no deberías sentir vergüenza después de todas las situaciones en las que los he atrapado. Me atrevería a decir que conozco su cuerpo casi tanto como Sonia.
- Perdóname, pero cuando te llegan las ganas te llegan -en automático me rio, porque no se me olvida que hace un mes me los encontré así en el cuarto de limpieza cuando iba por una escoba. Siento la experiencia más cercana, anteriormente los había encontrado en otras situaciones.
- Pero enserio, deberían cerrar la puerta, no me gusta ver porno en vivo, tampoco en internet – digo antes de que diga alguna babosada.
Camino a mi casillero bajo su mirada, abro la puerta y saco mi mochila color durazno, que me regalo Emilio en mi cumpleaños porque dice que todavía tengo cara de bebe y me veía extraña con una bolsa de mano.
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Sweet Nigth [[[ HEN 7 ]]
Teen Fiction"un grupo de chicos, lograron cumplir sus sueños pese a que los demás les dijeron que no eran nada, que no eran nadie, ellos empezaron de lo mas bajo hasta convertirse en una de las mejores bandas a nivel mundial cada uno con diferentes cualidades p...