Después de haber superado muchas cosas en sus dos años anteriores en Hogwarts, las aventuras y el descubrimiento de cosas no pararán. Jazlyn encuentra una ambición y tendrá que enfrentarse a un sin fin de obstáculos más. Tal vez un acontecimiento fa...
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A la mañana siguiente, Jaz se levantó temprano para arreglarse y tomar el desayuno que Gus le llevó a su cuarto junto al de Harry. Ambos chicos, acompañados de Diane, Marcus, Sebastian y el chofer, salieron de la mansión Ramsay para ir a Londres. Cuando faltaban diez minutos para las once en punto de la mañana, los Ramsay y Harry llegaron a King's Cross. Se encontraron en la plataforma nueve y tres cuartos con los Weasley y Hermione.
Jaz se subió al expreso de Hogwarts junto a Harry, Ron, Hermione, Sebastian y Ginny. Todos se asomaron por la ventanilla, para agitar sus manos hacia los señores Weasley y Ramsay, que se despedían de ellos desde el andén.
Apenas el tren partió, Sebastian se fue al vagón de los prefectos, y todos los demás caminaron a lo largo del tren, buscando algún compartimento vacío.
—Necesito decirles algo a solas —murmuró Harry, inclinándose hacia Jaz, Ron y Hermione.
—Vete, Ginny —dijo Ron.
—Qué agradable —ironizó ella frunciendo el ceño, y se fue muy indignada.
Los cuatro amigos siguieron buscando algún vagón, pero todos estaban ocupados, excepto uno justo al final del tren. En él solo se hallaba un hombre profundamente dormido, que a simple vista parecía muy enfermo y enmarañado. Se veía muy joven, pero a la vez era muy canoso y tenía unas notables ojeras.
—¿Quién es? —preguntó Jaz, acomodando su baúl en el portaequipajes y tomando asiento al lado del hombre.
—El profesor RJ Lupin —respondió Hermione, acomodándose en su asiento.
—Sabes todo —comentó Ron—. ¿Por qué lo sabes todo?
—Lo dice su maleta —repuso Hermione, señalándola.
—Ah... —musitó Ron.
Todos se acomodaron en el vagón. Jaz se sentó junto al profesor y también junto a Harry, mientras que Ron y Hermione se sentaron en la butaca frente a ellos.
—¿Qué enseñará? —preguntó Jaz mirando al profesor detalladamente. Por un momento se le hizo muy guapo, pero al pensarlo desvió la mirada de inmediato y se dio un golpe en la pierna.
—Está claro —contestó Hermione—. Solo hay una vacante: para profesor de Defensa Contra las Artes Oscuras.
—Bueno, espero que no sea como los anteriores —comentó Ron no muy convencido—. No parece capaz de sobrevivir a un maleficio... Pero bueno, ¿qué nos ibas a contar, Harry?
Harry explicó todo el tema sobre Sirius Black, de lo que Jaz ya estaba completamente enterada, e incluso más que todos los presentes. Ron se puso como verde y Hermione muy preocupada.
—Entonces... ¿Sirius Black se escapó de Azkaban para encontrarte? —repitió Ron, pálido.