10- Dinner

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—¡Que no quiero!

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—¡Que no quiero!

—Bu, ven aquí.

—Ño, ¡no quiero ponerme esa ropa fea! —Kook giró en la esquina y contuve un ataque de risa, mi pequeño siempre armaba un gran berrinche cuando le pedía que se arreglara para salir. Estaba tranquilo hasta que le dije y salió corriendo, en medias.

—Bu, ya hemos pasado por esto ven aquí —al principio corría detrás de él, ahora camino con toda la tranquilidad del mundo, porque que voy a atraparlo.

—¡No puedes obligarme! —La edad mental de mi pequeño y su comportamiento variaba mucho, dependiendo de qué tan pequeño se sentía.

Habían días en los que quería ser mimado y consentido como si fuera un bebé y otros en los que se convertía en un infante berrinchudo.

—No te estoy obligando, te estoy diciendo que debes vestirte porque vamos a salir —mis jefes me invitaron a una cena y pienso llevar a Kook no me gusta dejarlo solo por mucho tiempo.

No es que pase algo malo, simplemente me gustaba pasar tiempo con él y deseo aprovechar el respiro que es el principio de mes, todo se vuelve caótico cuando avanza el mes.

Era divertido perseguirlo por la casa, siempre se emocionaba y pensaba que jamás lo iba a atrapar.

—Vamos, bu. Yo también debo arreglarme —eso captó su atención porque se asomó desde la puerta de la cocina, sus ojitos grandes brillando.

—¿Me darás galletas si lo hago?

—No

—Entonces no —corrió hasta la otra punta de la cocina y nos dividió la mesa lo vi entrecerrando los ojos.

—Ven aquí —pronuncie despacio y él corrió hacia un lado, yo trate de atraparlo y dimos un par de vueltas rodeando la mesa, chilló cuando lo abrace por la cintura y lo alce entre quejidos, le hice cosquillas y él se retorció entre risas.

—No, ¡no quiero!

—No es opcional amor.

Nos detuvimos al frente del edificio de mis jefes, revisé a Kook y por suerte estaba impecable lo había vestido con ropa casual pero acorde a su edad

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Nos detuvimos al frente del edificio de mis jefes, revisé a Kook y por suerte estaba impecable lo había vestido con ropa casual pero acorde a su edad.

—¿Puedes ser un chico grande para Daddy? —Kook negó y yo asentí, de todas formas mis jefes ya sabían y no pensaba obligar a Kook a ser grande.

—Está bien, vamos —Kook sujetó mi brazo y me vio con miedo.

—¿Qué pasa amor?

—Uhm, y-yo —le di un besito en la sien entendiendo su sentir, a veces se ponía nervioso con extraños y se volvía muy tímido.

—No te preocupes amor, te caerán bien —llame a Namjoon y me contestó al segundo tono.

—Hyung, estoy abajo.

—Ya te abro —la puerta emitió un pitido eléctrico fuerte y Namjoon apareció detrás de ella.

—Hola, Hyung —lo saludé y Kook se aferró a mi brazo tan fuerte que me dolía un poco.

—Hola Taehyung-ah, y ¿a quién tenemos aquí? —Kook trató de esconderse detrás de mí pero yo me aparté para que lo viera —Hola pequeño.

—¡Oh pero si es adorable! —Jin mi otro jefe, apretujó las mejillas de Kook y él se apartó con una mueca sobando su mejilla

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—¡Oh pero si es adorable! —Jin mi otro jefe, apretujó las mejillas de Kook y él se apartó con una mueca sobando su mejilla. —¡Nam míralo es tan bonito!

—No soy bonito —murmuró Kook.

—Lo eres amor —susurré en su oído y sus mejillas enrojecieron.

—Vamos, por aquí —Nam nos condujo a la sala de estar y Kook chillo cuando vio a Jimin.

—¡Minnie!

—¡Kookie! —ambos corrieron a darse un abrazo y yo salude a Yoongi con un gesto.

—¡Daddy feo no me dijo que estarías aquí! —Kook me miró mal y yo contuve una risa.

—¿Sorpresa?

—¡Hyung malo! —Jimin lo atrajo contra su pecho y Kook se inclinó hacía él, siendo gracioso por la diferencia de altura, ambos pequeños se molestaron conmigo.

—¿Quieren galletas pequeños? —Jin los llamó desde la cocina y luego de compartir una mirada ambos salieron corriendo.

—Jin no exageres que luego no duerme —me acerque a los sillones de la sala donde se había sentado Namjoon y estaba sentado Yoongi.

—Relájate —me ofreció una botella de soju y la acepte.






"Su pequeño berrinchudo"









Hace poco aprendí que la edad mental en Little Space no es siempre la misma y pensé aplicar eso aquí, en este capítulo Kook tiene la mentalidad de un pequeño de cuatro o cinco años

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Hace poco aprendí que la edad mental en Little Space no es siempre la misma y pensé aplicar eso aquí, en este capítulo Kook tiene la mentalidad de un pequeño de cuatro o cinco años.

JK's DaddyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora