Dance To Live | Kookmin AU

•51•

Jimin aún no había llegado.

Jungkook había abandonado el escenario hacia solo minutos, había dado todo de él, pero aún así no había dejado de pensar en él rubio que no había llegado a la hora acordada.

Estaba preocupado.

Jimin le había respondido de tal manera que le pareció extraña viniendo de él, pero lo que lo mantenía inquieto era el no saber el porqué de ello.

No sabia que había hecho para enfadar al mayor.

Las estilistas y maquiladoras seguían esperando, el staff estaba en una situación complicada pues necesitaban al chico de manera urgente. Sabían que no podían hacer esperar demasiado al público, pero si seguían adelante no habría vuelta atrás.

Y el miedo de Jeon creció.

No quería que su chico no cumpliera su sueño por un malentendido.

Había prometido ayudarlo y eso haría.

Seguramente tendría problemas luego, pero poco le importaba.

Dejo su camerino, bajo las extrañas miradas de las maquilladoras. Namjoon, quien estaba en la puerta lo siguió.

— ¿Que haces Jeon? Tienes que volver a tu camerino.— Namjoon hablaba tranquilamente cuando en realidad estaba más nervioso que el menor.

— Tengo que hacer tiempo, sé que Jimin llegará.

— ¿Y cómo pretendes hacer eso?— Preguntó namjoon, siguiendo el paso apresurado del castaño.

— Yo no lo haré...

Jeon abandonó el backstage, siendo fotografiado por cientos de cámaras, pero poco le interesó pues su objetivo no estaba muy lejos de allí.

Su padre estaba sentado en una de las primeras filas, y al verlo acercarse frunció su ceño.

— ¿Que haces aquí Kook? ¡Estás atrayendo la mirada de las personas! Vuelve a tu lugar.— Dijo intentando disimular su disgusto.

— Necesito tu ayuda.— Su padre quedó en silencio. — Por favor...

— ¿Que sucede?— Sabia que mínimamente lo escucharía.

— Jimin está atrasado, necesito hacer tiempo... No puedo dejar que se pierda esta oportunidad.

— Si está atrasado será su problema, tu has hecho tu parte Jungkook. No tienes porque hacerte cargo de esto.— Decía el Señor Jeon con su aún fruncido ceño. Ya era característico de él.

— Lo sé, lo sé... Pero... Es mi culpa que esté atrasado y necesito solucionarlo. Por favor papá, él quiere esto, es su sueño... Es lo que más ama hacer, como mamá y como yo.— Dijo Jungkook desesperado, sin olvidar poner sus típicos ojitos manipuladores.

El Jeon mayor soltó un sonoro suspiro, entendiendo a su hijo y resignado a ser parte de algo que podía salir muy bien o muy mal.

— Bien, veré lo que puedo hacer... Pero luego hablaremos seriamente ¿Ok?— Dijo en un tono severo.

Jungkook solo asintió con una dulce sonrisita en su rostro.

Rápidamente dejó el lugar para volver a su camerino. Ahora solo faltaba esperar.

(...)

— ¡Vamos amor, ya casi llegamos!— Decía Yoongi, intentando apurar a su novio.

— ¡No puedo pasar sobre el tráfico! ¡¿Ea que quieres que  mágicamente le carezcan alas al auto?! — Pero solo estaba logrando desesperarlo.