♡08.

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El último día de clases... ¡adiós y hasta nunca!
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Caos.

La conversación que tuvo con sus padres para contarles la verdad fue un caos total.

En cuanto las palabras Hyunjin, destinado y renegó de mí, salieron de su boca fue como si activara el detonante de una bomba.

Sus padres enloquecieron, jamás los había avisto actuar con tanta furia, falto muy poco para que su padre fuera a la casa de Hyunjin a darle una paliza. Él no era alguien violento, de hecho, jamás le vio alzar la voz nunca, era la primera vez en su vida que lo veía actuar de una manera tan descontrolada, le tomó por sorpresa, se esperaba más una reacción explosiva por parte de su madre, sin embargo, no de su padre.

Gracias a los padres de Seungmin y un par de vecinos pudieron detener a su padre, se necesitaron 4 personas para eso.

Su madre en cambió fue otra historia, en un principio se mostró furiosa pero no parecía que fuera a cometer una locura como su padre, sin embargo, estaba totalmente equivocado. Durante la noche, cuando todos dormían, la omega salió sigilosamente de la casa en dirección al hogar de Hyunjin, si no hubiese sido por Jaebeom y Jingyoung a esta altura el alfa estaría varios metros bajo tierra, o quizás internado en el hospital.

Aunque claro, la pareja no pudo salvar a su hijo de un moretón en el ojo y un par de tirones en el cabello.

Al preguntarle la razón por la cual lo hizo su madre fue bastante simple 'ese idiota lastimo a mi bebé, no me iba a quedar con los brazos cruzados'

No se lo dijo en ese momento, pero que su madre lo defendiera con tal ferocidad lo hizo sentir un poco de satisfacción.

Su padre era el único que no estaba contento, ya que después de todo aquel escándalo -el cual por cierto le dio mucho que hablar a los vecinos-, la fianza que tuvo que pagar para sacar de la cárcel a su madre salió bastante cara, camino a casa después de que liberaran a su madre no dejo de quejarse del gobierno y los altos impuesto. Varios después Jaebeom y Jingyoung obligaron a Hyunjin a disculparse personalmente con él, no iba a mentir, fue la situación más incómoda por la que había atravesado en sus cortos 18 años de vida. Tener a sus padres matando con la mirada a Hyunjin, a los padres de este apenados y a Hyunjin nervioso evitando mirarlo a los ojos fue una mala combinación, sin embargo, aprecio las intenciones de los señores Hwang, la pareja se sentía bastante mal por lo que hizo su Hyunjin, apreciaban a Minho como un hijo y les dolió por lo que tuvo que pasar debido a su tonto hijo alfa, que tercamente seguía diciendo que no se arrepentí

En el fondo, sabían que no era verdad, pero su hijo era demasiado terco para admitir lo contrario.

Pero fin de cuentas, todo había quedado en el pasado.

Habían transcurrido casi 3 semanas desde aquel incidente, desde entonces no había visto a Hyunjin ni a sus padres, le entristecía un poco ya que la bonita relación de amistad que llevaban sus padres se había visto fracturada luego de lo ocurrido entre Hyunjin y él, aunque su padre le dijo que con el pasar del tiempo todo se arreglaría.

El tiempo arregla todas las heridas, a lo largo de su infancia escucho muchas veces aquella frase ¿sería realmente cierto?

Suponía que con el tiempo lo descubriría.

Sin embargo, aquello no era lo más importante para el en ese momento.

Solo una cosa rondaba en su mente: el último día de clases.

¡La tan anhelada libertad finalmente había llegado!

La razón por la que se encontraba más feliz de lo que debería era algo predecible; no tendría que volver a ver Hyunjin, ni a sus compañeros de clase y tampoco a esos odiosos profesores de secundaria que lo atormentaron con miles de trabajos al día.

¿Segunda opcion? ¡Jamas! ; banginho | hyunhoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora