𝐇𝐔𝐌𝐀𝐍 [ 𝐋𝐢𝐨𝐧-𝐎]

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En un silencio y tranquilidad una silueta bajá y delgada se encontraba meditando en los confines del más profundo bosque. Sin que nadie interrumpiera su concentración ignoró completamente la pequeña hoja que cayó encima de su cabeza, la cuál estaba cubierta con la capucha oscura de su capa.

La rayos del sol que se filtraban entre las hojas de los árboles se reflejaron en las pequeñas e incrustadas joyas que llevaba de decoración en su máscara blanca. La cuál se veía agrietada y sucia, por más que la limpiará los rastros de sangre no se irían tan fácilmente.

Saliendo de su concentracion, abrió lentamente los ojos y sin prisa alguna se levantó del duro suelo, sacudió sus ropajes. En su cabeza empezó a contar hasta el número diez y al terminar escuchó unos pasos cerca de ella.

——Con que aquí estabas...——detras de ella, apareció una silueta femenina que bien ella reconocía—— (N) ——dijo su nombre en forma burlona.

——Cheetara ——saludó con alegría en su voz——¿Tardaste en encontrarme?——le preguntó con burla, ya sabía la respuesta pero aún así quería escucharla.

——Muy graciosa, solamente a ti se te ocurre meterte en unos de los bosques más peligrosos de la zona.

——Tu bien sabes que yo puedo ser más peligrosa que este bosque, además de que esté bosque ya puede ser visitado——a pasos lentos se acercó hacía cheetara—— pero eso si, tendrán que entrar con al menos un guardia o dos.

——Bien, se lo reportare al rey.

——Gracias, ahora sí me lo permites, tengo que ir a buscar a dos tediosos que no se han contactado conmigo y eso me preocupa.

——Esta bien, ten mucho cuidado (N)——coloco suavemente su mano en la cabeza cubierta de la más bajá ——el maestro también desea verte.

——Hum, el maestro solamente desea volver a perder contra mi en el ajedrez.

Noto que cheetara sonrió y ella también sonrió cuándo le ofreció una mascara que ella bien conocía.

——El rey te lo manda de regaló, y espera con ansias tu regreso.

——Dale mis agradecimientos y también dile junto al maestro que muy pronto regresare a casa y no estaré sola en cuando llegué.

——Si tu lo dices está bien, yo también estaré esperando tu regreso con ansias.

——Adios cheetara, les mandas mis saludos a los demás ¡Adiós!

Y en un parpadeo, ella desapareció. Dejando sola a la felina quien sonrió ante su ausencia, eso ya no le sorprendía, su amiga y compañera era única en su clase y se había acostumbrado a muchas cosas gracias a ella.

——Por favor, vuelve pronto todos nosotros te extrañamos ——murmuró con un toque de tristeza.