El deseo y las caricias

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Metí mi ultima maleta, que era mas ropa y libros para poder sobrevivir en su casa, Alejandro se iba a quedar el fin de semana con nosotros, ¿el por que? pues mi padre queria hablar con nosotros, lo cual no me daba mucha confianza

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Metí mi ultima maleta, que era mas ropa y libros para poder sobrevivir en su casa, Alejandro se iba a quedar el fin de semana con nosotros, ¿el por que? pues mi padre queria hablar con nosotros, lo cual no me daba mucha confianza

- Dylan, ¿ya llevas todo?

- Si - conteste un poco molesto, no queria hablar mucho con él, porque sabia que era algo serio y posiblemente una situación complicada

- Un gusto suegro - Alejandro le dio la mano y mi padre se paso de largo, si ya era incomodo se estaba volviendo mas

- Buenas tardes

Y desde ese momento sabia que el ambiente se había puesto demaciado tenso, me subí al la camioneta y mire a Alejandro, el solo iba jugando con el brazalete del hospital y mi padre se subió al auto

- ¿Si se trajeron el pan?

- ¡Si! es que mi suegra cocina delicioso - Alejandro sonrío como niño chiquito pero viendo su brazo aún

- es de las únicas cosas que concuerdo contigo, ¿Y quien es el activo? espero que seas tu D

Retiro lo dicho, incomodo para mi ya que para mi padre y novio era algo normal, cosas de "hombres", solo faltaba que mencionaran el partido de ayer o algo así. Prendió la radio y nos volteo a ver

- Sino pone una rola de la Shakira no quiero nada - Menciono Alejandro sonriendo

- Ven para acá

Alejandro se paso al asiento del copiloto dándole igual que el carro estuviera en movimiento y yo me recargue en la ventana, saque mi libreta y busque la tarea atrasada de mate

- Bueno, Dylan, ¿Cómo vas en la escuela?

- Si soy sincero, de la mierda pero pues sobreviviendo

- ¿y eso?

Nunca me regañaba por decir groserías o por decir algún tipo de albur, solo cuando le contestaba mal a él o a mi jefa

- No me siento bien para ir a clases... ¿me siento raro?

- ¿Por Alejandro?

- Se que estoy feo pero igual soy irresistible - murmuro haciendo un pequeño puchero, que aunque no lo veía sabia que lo estaba haciendo

- No, por que no tengo muchos amigos o están en otra escuela o salón y no es lo mismo. Me siento mas solo de lo que ya estaba

- Hijo, no estas solo, tienes un novio feo pero irresistible

- Que puedo morir en cualquier momento -volvió a murmurar su respuesta

- Y que no va a morir en cualquier momento, amigos mas jóvenes que tu que se inspiran de ti y eres su ejemplo a seguir

- Eso no impide que me sienta solo

- Pero...

- Déjelo así... no es buen momento - Alejandro dijo en tono firme. Siempre fue el amigo que metía comentarios pendejos para alegrar a la gente, pero igual sabia cuando la conversación debía de parar

HOY NO... (Un Amante Del invierno)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora