DOS AMANTES VS LA CRUDA REALIDAD

48 4 0
                                    

Al despertar vi a Alejandro jugando con mi teléfono, nos cambiamos y bajamos a ver que desayunaríamos pero nos terminaron mandaron por el pan

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Al despertar vi a Alejandro jugando con mi teléfono, nos cambiamos y bajamos a ver que desayunaríamos pero nos terminaron mandaron por el pan. Alejandro estaba bostezando mucho. Eran las 9 así que quien sabe si encontraríamos pan.

La panadería o estaba lejos, como a 5 minutos. Vimos sino faltaba nada y salimos. Hacia frio, Alejandro tomaba mi mano y nos quedamos en silencio hasta llegar a la panadería.

—¿Qué pan quieres?

—Da igual, solo quiero dormir un poco – le pase las pinzas y tomo un panque.

—¿te tocan estudios? ¿Cuándo van a ser?

—No se, pero es lo de rutina.

Pusimos el pan en el mostrador y lo empezaron a poner en una bolsa de papel. El ambiente se sentía raro.

—¿todo bien? – salimos de la tienda – te noto raro.

—No pude dormir, y antes de que lo digas, no te iba a despertar.

—Meh, horas mas, horas menos de sueño – pasamos por los calles de siempre, no había mucha gente.

—No y punto.

—¡MARICAS! ¡OJALA SE MUERAN!

Nos detuvimos, Ale estaba tenso, voltee a ver y vi a tres chicos de nuestra edad. Dos de ellos los conocía, eran de la escuela, eran demaciado peleoneros, al otro no lo identificaba.

—Vámonos D, no les hagas caso.

—Esta bien.

—¡Oww! ¡les da miedo!

—Dylan, relájate.

—¡OJALA SE PUDRAN EN EL INFIERNO!

Se escuchaban mas cerca las voces, voltee otra vez y vi que se acercaban. El chico que no reconocía no sacaba sus manos de sus bolsillos, no me daba buena espina.

—Si ves que hacen algo, corres Ale.

—Dylan, ya vámonos – me jalo para que fueranos mas rápido – tenemos que desayunar.

Mi pulso estaba al mil, tenia miedo. Esto no había pasado antes, solo nos veían mal. Seguíamos avanzando pero se escuchaba que venían.

—Corres.

—No te voy a dejar.

—¡Que asco dan! – voltee al sentir el brazo del chico en mi hombro – ¿A dónde van?

—No te importa.

Los chicos se reía, Ale solo me veía molesto. Ellos vieron la bolsa del pan y se la trataron de quitar.

—¿que te pasa? ¿Algún problema?

—Ustedes son el problema – Me sentía apenado con Alejandro por lo que estaba pasando. Escuche como tosió y sabia que no era bueno que estuviera tanto en el frio.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jan 14, 2023 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

HOY NO... (Un Amante Del invierno)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora