Después de haber superado muchas cosas en sus dos años anteriores en Hogwarts, las aventuras y el descubrimiento de cosas no pararán. Jazlyn encuentra una ambición y tendrá que enfrentarse a un sin fin de obstáculos más. Tal vez un acontecimiento fa...
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Al día siguiente, Ron le pidió disculpas a Jaz por la bromita y ella lo disculpó, aunque nunca se enojó en serio, así que todo estaba bien entre ellos. Por otro lado, el rumor de que Jaz sabía hacer la maldición asesina se esfumó tan rápidamente como apreció, y cuando la veían en los pasillos, ya nadie salía corriendo (o al menos casi nadie).
Durante las próximas semanas, Jaz se la pasó demasiado preocupada por Sirius. Creaba horribles escenas en su cabeza donde los dementores lo atrapaban de diferentes formas, con las que incluso llegaba a soñar. Harry trataba de tranquilizarla sobre el tema, aunque él igual estaba preocupado. Jaz sentía la fuerte necesidad de tener algo para distraerse, como por ejemplo el quiddtich, pero no había absolutamente nada para hacerlo.
Un día Jaz decidió ir por la noche a robar una hoja de mandrágora al invernadero, o al armario de Pociones de los estudiantes. Todo esto para comenzar su proceso de transformación en animaga. Pero resultó mal, dado que la señora Norris, la gata del conserje, estaba justo afuera de la Sala Común de Gryffindor, como si estuviera esperándola. Y ya que pudo haber salido mucho peor, Jaz tuvo que abortar la misión.
Las clases de Defensa Contra las Artes Oscuras cada vez eran más sorprendentes y escalofriantes, sin embargo, muy interesantes y divertidas. Una tarde, el profesor Moody dijo que iba a ocupar la maldición Imperius sobre los alumnos y ellos tenían que resistirse, cosa que para Jaz fue algo fantástico.
—Imperio —dijo el profesor Moody, apuntándola con la varita.
«Rómpele la nariz a Malfoy» dijo una voz dentro de la cabeza de Jaz.
Tal vez si hubiera sido una tarea nada agradable para la chica, ella se hubiera resistido por completo, pero una oferta de ese tamaño no se le presentaba todos los días. Jaz se acercó a Malfoy y le dio un fuerte puñetazo que le rompió la nariz de inmediato.
Las clases con la profesora McGonagall no cambiaban, ella seguía siendo tan estricta como siempre y no dejaba de elogiar a Jaz y a Hermione por ser las únicas de la clase que habían podido transformar un erizo en un archivador. En la siguiente clase de Adivinación, Jaz, Harry y Ron casi no pudieron contener la risa al ver que la profesora Trelawney los había calificado con la nota máxima en sus trabajos, y el de Jaz era tan trágico, que la profesora quedó encantada y le dio cinco puntos extra a Gryffindor.
El profesor Binns había dejado muchas redacciones que Jaz terminaba de inmediato, gracias a su rapidez al escribir y sus técnicas para rellenar. La chica terminó prestando su tarea a todos los de Gryffindor de su curso, que estaban encantados de tener a una compañera que le gustara de verdad Historia de la Magia. Hasta Hagrid había dejado mucho trabajo con los escregutos de cola explosiva.
Jaz, Harry, Ron y Hermione volvieron al castillo de muy buen humor. Se encontraron con el vestíbulo lleno de gente abarrotada alrededor de un aviso en la pared. Ron, que era el más alto del grupo, tuvo que ponerse de puntillas para poder leer por sobre las cabezas de los alumnos
