Cap. 5

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Amo este aire tan lleno de frescura, pero no sus multitudes… y más si estás te pueden matar en cualquier momento.

Hace unos momentos nos despedimos de los chicos que aunque no me simpatizaron no quisiera que muriera su bebé, tengo esa debilidad ante los más débiles o más pequeños.

Le pedí a Trollino que buscará comida y agua en el mercado mientras yo iba a por las perlas.

¿Que no se supone que con tu estrella te puedes teletransportar a otras dimensiones sin necesidad de comprar perlas del portal?Pregunto mientras me entregaba mi mochila.

Yo se lo que hago, ahora ve y consigue lo que te pedí ¿Quieres? – Me coloque bien la mochila y al pronunciar mi pregunta este hizo una cara de molestia pero no dijo nada y se fue.

Solo me dio la espalda y aproveché para ponerme mi capucha e irme al lado contrario que el. No podía permitir que la gente me vea a la cara después de la paliza que recibí aquí, Dios me da pena solo de acordarme.

Pase entre la gente procurando que no me tocaran, entre ellos puede haber más de un maldito ladronzuelo profesional y no quiero arriesgarme a perder algo.

Llegué al lado donde venden materiales de otras dimensiones, este lado de la ciudad tenía más seguridad que la última vez que vine.

Me encamine entre las tiendas buscando una en específico, no tarde mucho en encontrarla y entre a esta.

Llame una… dos… tres veces y no venía a atenderme, miré a los lados buscando a otro vendedor para preguntar por el, una señora me dijo que había salido a revisar una entrega y que igual y no tardaba en llegar.

No me quedó de otra que esperar a que volviera, me recargue en la barra viendo hacia la salida con mi cara de amargura para evitar que vendedores ambulantes traten de venderme sus cosas a un precio algo estafante si les prestas atención.

La gente pasaba tranquilamente, los que querían entrar a la tienda solo les decía que está cerrado momentáneamente y se retiraban sin decir nada y otros escupiendo la entrada mientras se retiraban, que asco. Todo era tranquilo pero en cuestión de minutos esa tranquilidad desapareció al escuchar gritos de personas, aparentemente había unos peleando y los otros solo alborotan pero era demasiado escándalo para un par de exes que chocaron de hombro y estaban de mal humor así que asome mi cabeza por la tela, que servía para cubrir la entrada de la tienda, voltee donde se escuchaban los gritos y no era muy lejos, era en una zona abierta del lugar. Me acerqué y empece a hacer a un lado a los "exerianos" para poder ver quiénes se peleaban.

No era una pelea de dos… ni tres sino de cinco, cinco exes se peleaban por una aparente razón en común y esa razón era un chico el cual estaba en medio, tirado en el suelo queriendo hacerce bolita pero sacaba la cabeza para ver por dónde irse, supongo. Una pelea de 5 y un chico de unos 15 o 16 años de apariencia, ya había encontrado la razón de esto y madre mía, tantos lugares para "nacer" y le tocó en uno de los lugares más poblados de estas tierras, no solo el más poblado sino en dónde los exes más fuertes se juntan para hacer sus compras o para vender sus cosas.

Los exes que estaban a punto de pelear, el alboroto fue en todo caso por la aparición del muchacho, no eran unos simples y comunes sino gente de mi mismo nivel o superior. Eh visto a exes de menor nivel en este tipo de batallas pero meterse en una de estas sin que te iguales a ellos en poder o estratégia sería prácticamente suicidio y eso que los exes de este lado del mundo no pueden suicidarse sin que revivan.

Ya cargando sus esferas de energía alcance a ver a Trollino al otro lado también observando la iniciación de la pelea mientras se comía lo que creo que parecen dulces de regaliz… ¿Dónde saco el dinero para comprarlos?.

Apenas iban a soltar el primer golpe, después de varias frases para hacerse los más grandes e intimidar o hacer recapacitar a los demás sobre lo que van a hacer un grito fuerte y claro se hizo presente callando a todos y volteando a ver de dónde viene, este se subió arriba de unas cajas y ahí me di cuenta de quién era.

– ¡Atención! ¡Este no es lugar para guerras de este tipo! Somos exes civilizados y sabemos que una guerra de esta magnitud acabaría con nuestra mercancía – Decía con cierta razón, una molesta cierta razón pero sus palabras no calmarían a los grandes exes y al escuchar los abucheos fue cuando siguió hablando – Por eso le pido a los guardias que levanten al recién llegado y lo lleven con los demás que están en subasta – Así como dió la orden está fue cumplida y así la enorme multitud se desplazaba junto al chico cuyo miedo se olía a metros.

La enorme multitud me dejó perdido y solo buscaba con la mirada a Trollino esperando encontrarlo antes que el me encontrará a mi pero mi suerte no era la mejor de todas. En el momento en que lo localizó y lo llamo para que venga siento algo recorrer por mi cintura, miro abajo encontrándome con sus brazos que me daban un fuerte abrazo y se apegaba a mí y tratando de quitarlo Trollino ya había llegado… muy confundido.

– Quítate que estamos en público – Le dije pero ni así me hacía caso, vaya que me extrañaba – ¡Salóh! – Regañe mientras trataba de quitar sus brazos de mi cintura y el otro solo reía.

– Eh… ¿De que me perdí? – Hablo el pelinegro que solo se nos quedaba viendo

¿Ahora como le explicó la extraña manera de demostrar amistad que tiene Salóh sin que piense que le oculto algo? Si bien no lo hago Salóh se comporta de maneras muy extrañas con la gente que quiere y ama… y peor si se trataba de un varón. Por esta razón no quería encontrarmelo o al menos no enfrente de Trollino por qué el usa, o usaba, cualquier cosa para molestarme.










¿Debería dejar de actualizar cada mil años…? Nah

-¿Sabes Que? Ya No Sonrías- Mikecrack.exeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora