"CUARENTENA" Secuelas...

Montecristo y el pequeño mundo de Fernando

—Y entonces me desmayé —dijo Fernando.

—No lo ví venir, no tengo palabras para expresar esto pero lo buenos es que estas bien hijo mío, perdóname pero ya sabes que tenemos cosechas de sombras y no podré quedarme a cuidarte, estarán por su cuenta ya que que tu madre y las de tus amigos nos acompañarán ya que iremos a las ruinas de una gran ciudad —disimulaba Gabriel ante la frustración de su hijo.

—Si... bueno cuidate y hasta pronto quiero estar solo.

Cuando Gabriel se fue, Fernando abrió bien sus ojos para no llorar de impotencia, se levantó haciendo una mueca de dolor "el dolor ya es soportable" pensaba, al salir encontró a Josué hablando afectuosamente a Susan.

—Fernan...

—¡Calla! —levantó la voz Fernando —¡No puedo creer que después de lo que nos ha pasado estés ahí sin practicar!

—¡¿Cómo te atreves?! —intervino Susan.

Fernando la ignoró, miró con desprecio a su hermano menor y se alejó caminando, la risa maniática de Lucy opacaban sus pensamientos, nunca le iba a perdonar lo que le hizo a Isabel, aquel "hospital" ahora parecía un laberinto interminable, "¿Estará bien?" pensó de pronto, y buscando y buscando encontró el cuarto de la chica que le saturaba la mente.

Toco la puerta y nada, volvió a tocar y una voz dulce respondió.

—Pasa —dijo.

Fernando entró, la luz entraba por la ventana iluminando el rostro de una joven, sus cabellos castaños brillaban y sus ojos algo decaídos lo miraban con alegría, el solo dejo caer un par de lágrimas y se lanzó para abrazarla(qué dolor ni qué ocho cuartos), aquel momento nunca se olvidaría para los dos.

—¿Cómo estás? —preguntó Fernando algo sonrojado.

—Me siento mejor pero aun me duele la herida.

—¿Dónde te duele? ¿aquí? o ¿aquí? —dijo preocupado sin darse cuenta de lo que estaba haciendo hasta muy tarde.

Un momento incómodo y las risas de dos jóvenes enamorados asesinaron al silencio. Por ahora dejémoslos tranquilos y tomémonos un tiempo para hablar de Montecristo.

MONTECRISTO:

Empecemos por lo básico, tomemos de referencia un rectángulo en vertical, ahora dividimos este rectángulo en tres partes iguales, al igual que "La Ciudadela" Montecristo está organizado de una forma similar, la hacienda, el hospital y otros locales de abastecimiento eléctrico se encuentran en el centro de Montecristo, en la tercera parte superior se encuentra los establos de ganado más el reservorio de agua que es capaz de abastecer las veinticuatro horas a todo Montecristo, los ganados son manejados por dos trabajadores y sus respectivas familias: Jose y Juan ambos encargados de las ovejas y vacas respectivamente, apoyados por sus familias estas personas ordeñan y si Gabriel o TIME lo desean matan ovinos para abastecer de carne a Montecristo. En la parte inferior del "rectángulo" se encuentran los campos de cultivo, Zoey es la encargada de este trabajo, ayudada de bastantes habitantes de Montecristo y miembros de TIME, estas tierras extensas son capaces de producir desde las totalmente necesarias patatas hasta uvas y otras frutas(todo con algunos consejos de Gabriel por supuesto) y gracias a este experimento hubo vino en Montecristo después de tantos años. Volvamos a la parte central de Montecristo, como ya lo explique están el hospital y otros locales como el taller mecánico, la armería y la central termoeléctrica(para iluminación y otros fines productivos), detrás de todos estos locales hay un muro de concreto en el que se colocan placas con los nombres de todos los caídos antes, durante y después de C-19 (el que aparece al principio de esta historia pues). Ahora sí, volvamos con Fernando e Isabel.

—No quiero que te pase algo como lo de ayer, te juro protegerte con mi vida y moriré en el intento, te lo juro.

—Yo también lo juró, tendremos que capturar a esa bruja como sea, tenemos que pensar en algo, en fin quiero descansar... ¿y tú?

—También, descansa, mañana y pasado mañana volveré.

—De acuerdo...

Y así pasó una semana, entre encuentros a escondidas y recuperaciones rápidas y el tiempo pasó tan rápido que no se dieron cuenta que había pasado la semana; Gabriel y la caravana todavía no regresaban, los chicos se curaron más rápido debido a sus alteraciones genéticas por la radiación absorbida por sus padres.

Afuera los esperaban Arturo y Enrique con el resto de la banda y en eso estaban festejando cuando llegó JD y mirando a Fernando.

—Tienes las agallas y valentía de tu padre, serás un buen líder después de todo, y tu Isabe... ¡¡AAAGHH!!!

Todos los presentes vieron cómo aparecía una mancha roja en la camisa de JD, luego una carcajada maniática, era Lucy que había vuelto por más y esta vez se llevaba a JD consigo o bueno eso es lo que ella creía pues todos los jóvenes menos Fernando e Isabel la atacaron sacando sus armas, ella solo atinó a escapar por el interior del hospital.

Susan aterrorizada veía como su padre se desangraba en el piso sin que ella pudiera hacer algo, hasta que llegó Flor con un kit de emergencia.

—Estará bien —fue todo lo que dijo.