Bryce
La chica seguía corriendo como si su vida dependiera de ello. No entiendo por que reacciono de esa manera, bueno... creo que el que estuviéramos desnudos frente a frente, no ayudaba... pero cuando empezó a correr adentrándose al bosque, me preocupe, ese bosque maldito no traía nada bueno y el que una linda chica corriera en esa dirección era una muy mala señal.
Estaba a unos cuantos pasos de alcanzarla, pero de pronto mire como ella se tropezaba con unas ramas, me acerque rápido a ayudarla a levantarse, pero de pronto se aparto como si mi toque le asustara.
-tranquila, no te pienso hacer daño, te lo prometo- dije viéndola directamente a los ojos y ahí en ese instante me sentí extrañamente atraída mas a ella, sus ojos color verde, se estaban grabando en mi memoria, sentía que jamás podría dejar de verlos.
-entonces ¿por qué me seguías?
-el ... el bosque... es... - ¡joder Bryce reacciona ¡- el bosque es muy peligroso, recién me perdí, venia con unos amigos, cuando los lobos nos atacaron, y yo no te podía dejar sabiendo que eso te podía pasar a ti.
-pero tranquila, nos hemos alejado bastante pero aun así se como salir de este maldito bosque, en un par de horas llegaríamos al pueblo.
Ella solo se me quedaba viendo a los ojos como si jamás hubiese visto a un hombre, pero a pesar de eso podía notar la preocupación que emanaba de ellos, aunque todo eso fue opacado cuando sus manos comenzaron a recorrer mis brazos hasta mi cuello, y ella se fue acercando más a mi rostro.
Su mirada se hizo más intensa, sus manos quemaban sobre mi piel y sus labios sobre los míos parecían que querían hacerme perder la cabeza, tan suaves pero carnosos, húmedos y tiernos, perfectos en pocas palabras.
El beso era exquisito, sus labios devoraban los míos, mis pensamientos se habían esfumado, solo estamos ella y yo.
Cuando creí que ya no lo soportaría más, que necesitaba más de ella, sutilmente se apartó, mi mirada embobada encontró sus hermosos ojos.
-vete, vete y jamás vuelvas a este bosque, nunca has visto estos ojos y jamás has probado estos labios que te han besado.
Sus palabras parecían como un susurro lleno de miel, me sentía como una abeja atraída, pero a la vez sentía que si probaba mas de esa miel estaría cavando mi propia tumba.
Ese solo pensamiento me hizo retroceder, ¿pero que había sido eso? ¿Por qué ha dicho eso? De solo pensarlo más, más lograba confundirme.
La chica, sin embargo, parecía satisfecha, se aparto de mi camino y se adentro mas rumbo al bosque, ¿pero qué carajos? Sentía que era hora de irme, tenia que dar la vuelta y seguir con mi camino, pero sus palabras, el beso y sus ojos no salían de mi cabeza.
Y aunque sabia que era mala idea, la volví a seguir...
Estaba a unos cuantos metros de ella, algo me decía que debí dar la vuelta, pero sus ojos no me dejaban apartarme, tampoco sentía que debía acercarme a ella, algo dentro de mí me decía que ella podía ser muy peligrosa.
La noche se estaba acercando y la brisa fría comenzaba a aparecer, pero a ella parecía no importarle, en cambio yo a cada cinco minutos me repetía lo loco que estaba, por estar siguiendo a una chica en medio de la noche y en un bosque tenebroso.
Y cuando pensé que las cosas no se podían poner peor un aullido de lobo me hizo detenerme, me fijé en la chica y ella parecía no importarle. Y entonces los vi, los lobos estaban muy cerca de ella.
Corrí hasta alcanzarla, la jalé del brazo y empecé a correr con ella. escuchaba a los lobos cada vez mas cerca y ella no parecía asustada, más bien podría decir que estaba mas sorprendida que estuviera ahí.
A unos tres metros más se encontraba una casa, no se miraba vieja ni desgastada, me hubiese gustado haberla detallado más, pero tenía unas bestias de tras de nosotros, no lo pensé dos veces y me metí a la casa junto con la chica.
-¿Qué haces aquí?
- ¿Qué?... pero ¿qué diablos te pasa? Unos lobos gigantes estaban apunto de comerte viva y solo dices eso.
Me acerque a la ventana y no se miraban rastros de los lobos.
-no deberías estar aquí... se supone que debías irte! No, no, no, yo te bese...
-lo sé, ¿qué diablos fue eso?
-algo debió salir mal, seguro solo debo hacerlo de nuevo
Y sin mas tenia a la chica sobre mí, igual que sus hermosos labios.
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Close your eyes
FantasyBryce No sabía que estaba pasando, no sabía por qué me estaba pasando esto, no entendía por qué me había aventurado de esa forma, no sabía cómo había terminado enamorado de ella, pero algo de lo que estaba segura es de que no me arrepentía de haberl...