El Chico de la Venda en los ojos I & II (Satoru Gojo x OC)

[36]

Hola ¿Cómo va su día?.  En la noche, maybe salga el otro cap. Espero que les guste y disfruten la lectura. 

—𝕊𝕒𝕥𝕠𝕣𝕦 𝔾𝕠𝕛ō—

—Deberías dejarla dormir tranquila — Ieiri entró en la enfermería y se quedó mirando incrédula la escena en la que Drossi dormía entre mis brazos con su cabeza recostada en mi pecho. — y deberías ir a bañarte, hueles a sangre.

—No quiero dejarla sola...

—Me quedaré con ella. Anda a descansar.

—Seguiré buscando — la interrumpí, porque era lo que quería seguir haciendo. Era más que obvio que los tipos que ella mató, solo eran peones y que había alguien más detrás de esto. Alguien más, que se ocultaba muy bien, porque en las 5 horas que busqué como loco no encontré rastro de nada. Solo, unos cuantos chamanes no registrados, delincuentes... — si se la llevaron tuvo que haber sido por mi culpa.

—Satoru, no puedes culparte por eso... ella es de un clan que...

—No fue por eso, fue por mi culpa... de Androssi casi no hay registro de nada, pocos saben de su existencia y lo poco que he encontrado fue información difícil de conseguir, ha pasado lejos de este mundo por años.

—No deberías preocuparte tanto, ella sola pudo con todo.

—Sé que ella puede cuidarse sola, pero... parecía como si estuviera fraccionada.

Ieiri frunció el ceño, pero yo no sabía como explicarlo. Androssi tenía una actitud sádica frente a matar, frente a la muerte, como si enserio no le molestase o importase siquiera la vida de otra persona, pero sus ojos me mostraban tantas cosas como si estuviese herida más allá de todo lo que sucedía en lo físico. Después de todo, matar a una persona tiende a ser más difícil para algunos que para otros, pero parecía haber mil cosas más pasando por esa mente que no entendía. Fue desolador ver esa expresión de tristeza en el rostro del alegre tornado.

—No puedes seguir matando a quien creas que estuvo involucrado.

—Ya no quedan sospechosos — suspiré pesado, ni siquiera pude contralarme por la ira. Literalmente solo los miré y los mate.— tampoco creo que encuentre quien se la llevó .— lo admití, pero aun así queria seguir buscando.— y no creo que se momento para preguntarle.

—Da igual, báñate... — suspiro ella de forma pesada —estas en mi zona. Lárgate...

—Ieiri — ella me empujaba fuera del lugar.

Es de madrugada, mire por la ventana de los pasillos de la escuela... pronto saldrá el sol.

En América deben ser las 5 de ayer...

Tomé mi celular del bolsillo y la llamé, como era de costumbre contestó al último tono.

— No me vengas a decir que no vas a venir... — contestó en tonos gruñones aun con esa voz tan chillona.

—¿Qué paso Nelly, frustrada sexualmente sin mí?

—Lo peor que puede haber hecho en mi vida fue acostarme contigo.

—Me lo dicen mucho últimamente — sonreí con pesar. No era como si Androssi lo dijera pero sé que lo pensaba.

—¿Qué quieres?. ¿No son como las 5am allá?

—Nelly... necesito que me hagas un favor.

—Te va a salir caro.

—No importa. Averíguame todo lo que puedas sobre Androssi Agüero Zahard.