↠Geralt of Rivia
↪𝑻𝒉𝒆 𝑺𝒖𝒄𝒄𝒖𝒃𝒖𝒔
Muchos creen que los súcubos,
son demonios de belleza extraordinaria, piel perfecta y cabello oscuro o rojizo, coquetos, lujuriosos, que consumen la energía de la víctima mientras mantienen relaciones sexuales y con intenciones malas y macabras hacía los humanos... y pues ciertamente es cierto.
Pero hay una que, increíblemente, odia, Detesta, aborrece a su misma especie. Solo por el hecho de que nunca alguien o algo vaya llegar a sentir amor hacia una criatura como ella por ser esa clase demonio. Le han hecho mucho daño, la maltrataron, la torturaron y la han acusado de asesina, cuando ella lo único que hacia era escapar de si misma. Le "traumaron" tanto esos hecho que también repudia de cierta manera a la raza humana. Siendo ellos y no ella los monstros. Ella nunca a tenido relaciones aún, nunca a intentado seducir a un hombre para obtener algo a cambio, nunca pero nunca de los nuncas ella haría algo así, se siente asquerosa y una malnacida por eso. Ella es conocida como Neferet, una mujer de apariencia joven, de Cabello negro azabache, estatura promedio, contextura física como la de un reloj de arena, con pechos grandes, caderas pronunciadas, cuerpo tonificado, piel de un bronceado claro y ojos rojos como la sangre.
Todos los súcubos se conocen pero no andan en "manada" por así decirlo, cada uno tienen que encontrar a su presa antes de que otro se las quite, a Neferet la conocen por ser la "purita" de ellos, como nunca "caza" se les hace la tarea mas fácil, puesto que de entre todas es la mas perfecta.
Hubo un día que ella fue a la Taberna de Blaviken para poder tomar algo puesto que ella "vagaba" por todas las tierras de ese mundo en busca de alguien que... la amara como se debía, pero ¿Qué mal hace tomar un trago?
Iba vestida de una forma que disimulaba su cuerpo y su especie. Un vestido con corsé negro de rombos grises y una capa negra con capucha para tapar su rostro y ojos rojos.
-¿Qué desea señorita?- le pregunto la mesera de la Taberna a Neferet.
-Cerveza.
-¿Esta segura? una señorita como usted debería tomar algún vino o jug-
-Cállese y tráigame un tarro de cerveza...- le dijo levantando la cabeza para mirarla, dándole una mirada severa y fuerte, eso si, la mesera pudo notar sus brillantes ojos rojos. Así que se fue temblando del miedo de allí a pedirlo al cantinero que le diera su tarro.
Cuando le llevaron el tarro, unos 5 minutos después apareció por la puerta del establecimiento un Hombre con capa, cuando se quito la capucha, ella pudo ver a un hombre Peliblanco, de un porte fuerte y alto, con un traje de cazador y ojos ámbar, pero no un ámbar normal, era un ámbar brillante y fuerte que demandaba seguridad y misterio. Nuestro Brujo Geralt de Rivia.Neferet quedo perpleja al ver a semejante ser, no se había dado cuenta que se le había quedado viendo, admirando su ser de manera curiosa. Estaba hablando con una mujer de pelo corto y marrón, ella pensaba que no se iba a dar cuenta de su mirada, hasta que el volteo a verla con esa mirada firme y misteriosa ella se sorprendió un poco y sus ojos, sus bellos y brillantes ojos rojos la delataron brillando con intensidad, igual paso con nuestro querido brujo, aunque no la podía ver por la capucha, esos ojos que tenia lo dejaron en cierto modo hipnotizado, de tal manera que le dejo de prestar atención a la mujer que le hablaba, dándose cuenta de que era una súcubo.