02 Melodía

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-buenos días, Seth! –saludó Faith con una sonrisa brillante, notablemente de buen humor, y justo… venía ella sola.

Lo que Seth necesitaba. 

Estaban en el pasillo fuera del salón en el que tomarían la primera clase, sistemas de representación geométrica 1.

Y, la duda que le daba vueltas al pelirrojo no era nada acerca del arte o algo parecido. Pero sabía perfectamente que Faith podía contestársela, eso mismo había dicho Alexa, antes de que se empeñara tanto en cortarle las posibilidades para preguntarlo. Pero ahora no había peliazul dando vueltas, así que… 

-buenos días… ah… desde ayer que quería preguntarte algo –comenzó, con una sonrisa suave y tranquila mientras se iba acercando a ella para encararla y volver la platica mas personal. 

-oh… si querías preguntar algo, debiste hacerlo

-sí, ah… eso es justo lo que quiero hacer, ah… y bueno, es que ayer, cuando regresé al salón y Alexa…

Pero si parecía que la habían invocado! Apenas pronunció su nombre, su voz se escuchó a espaldas de Seth, y le saltó encima, colgándose de su cuello desde atrás, para tironearlo hacia abajo y poder ver a Faith por sobre su hombro. 

-buenos días! –saludó con la misma animosidad que parecía tener siempre… oh, sí, claro… “siempre”

-buenos días –saludó Faith de vuelta, ladeando un poco su cabeza, haciendo que su oscuro cabello se agitara un poco. 

-ah… sí, Seth, ibas a preguntarme algo, no? –su atención volvió pronto al pelirrojo, recordando que desde el día anterior éste tenía una duda. Y la verdad era que Faith adoraba dárselas de sabelotodo en todos y cada uno de los aspectos. Así que… resolver una duda, era simplemente lo que esa morena prefería más que otra cosa. 

Pero, la que se crispó ante eso, fue la peliazul que estaba colgada en su cuello. 

-es un lindo día para no hablar de cosas innecesarias, no? –la sonrisa de Alexa se volvió nerviosa de pronto, girando la mirada hacia Faith,  intercambiaron un par de palabras por los ojos, y luego Faith frunció el ceño.

-le has dicho algo ya, cierto? –parecía verdaderamente molesta ahora. 

Pero es que acaso todas aquí tenían un humor tan cambiante como el clima?

Seth se sintió un poco incómodo, y no por tener aproximadamente 50 kg colgando de su cuello, sino porque sabía que… Faith no le daría las respuestas que quería. 

Así que se sacó de encima –con delicadeza– a Alexa, y se sacudió el cabello con la mano mientras era testigo de la forma en que Faith parecía empezar a regañar a Alexa.

Pero mientras, el pelirrojo giró el rostro hacia un lado y vio un conocido cabello rubio pasar hacia las escaleras… 

-eh… chicas… vuelvo en un segundo –dijo con cierta prisa, y sin más, se fue hacia las escaleras a paso rápido, pero sin correr pues no quería mostrar que tanta prisa tenía por verla y cruzar palabras de nuevo.

-espera, Seth! –Alexa fue la primera en saltar, completamente alarmada y comenzando a ir hacia donde el pelirrojo también. 

Mientras, Faith sólo lo veía con expresión seria, cruzándose de brazos. 

Pero Seth no prestaba atención, y fue incluso a meterse al salón donde la rubia había entrado. 

¿Puedes verme? (pausada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora