ღ Capítulo 22 ღ

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Mi sangre, sudor y lágrimas, mi cuerpo, corazón y alma; sabes muy bien que todo es tuyo. Es un hechizo para castigarme. Bésame aunque duela, rápido, ven aquí porque ya no puedo sentir el dolor. Cariño, está bien beber, pero ahora es mi turno de tomarte profundamente en mi garganta. Tú eres mi whisky.
Blood, Sweat & Tears; BTS

La diferencia de ambiente resultó muy perceptible al dejar el establecimiento un par de horas después; o al menos para algunos de los chicos, porque los demás estaban lo suficiente ebrios como para no dar importancia a eso o al qué sería de ellos el resto de la noche. En fin, minucias.

Yoongi fue el primero en caer rendido ante el sueño nada más tocar el acolchado asiento trasero del coche de Taehyung, su berrinche de no querer irse y regresar para subirse sobre la barra a bailar había quedado a medias. San y Wooyoung le secundaron, acurrucados el uno junto al otro, luego de que el rubio les dijera algo como que eran los mejores del puto mundo porque podía dormir la mona sin correr el riesgo de que violasen su precioso trasero.

Jimin y Hoseok les ayudaban a cuidar del trío de bebés, acomodándoles bien en el asiento y poniéndoles el cinturón de seguridad.

—¿Estás seguro de que no vienes conmigo? —preguntó Taehyung, acercándose a donde Jungkook se sacaba del bolsillo las llaves que le había quitado a su rubio amigo.

—Woo me mataría si se entera de que dejé a Jimin llevar su moto —le dijo, y fue tomado desprevenido cuando el pelirrojo le sostuvo de la nuca y se acercó para besarle con fuerza. Le correspondió, con los pensamientos hechos un revoltijo, y abrió los ojos con sorpresa cuando sintió su lengua invadiéndole sin permiso, recorriendo su boca y entrelazándose con la suya. El mayor se apartó y él le observó con los ojos bien abiertos—. ¿Y tú de qué vas?

—Estaba midiendo tu grado de alcoholemia —respondió con simpleza—. Y he de decir que sabes mucho a soju.

—Supongo que eso no es un cumplido.

—Solo ve con cuidado —le dijo, retrocediendo un par de pasos hacia la puerta abierta del asiento del piloto—. Y delante de mí.

Jungkook le guiñó un ojo y dio media vuelta para dirigirse a la moto aparcada a unos cuantos metros. Le entregó el casco de San a Hoseok y fueron los primeros en iniciar el corto recorrido hasta su apartamento, con Taehyung y los demás siguiéndoles de cerca.

El portero de turno les siguió con una mirada de curiosidad desde que bajaron de los vehículos hasta que les perdió de vista. Jungkook al frente y los demás arrastrando cada uno a un borracho de seguro era lo más entretenido que había visto en todo su horario de guardia.

El azabache abrió la puerta y encendió la luz, haciéndose a un lado para que pasaran. Les dejó que acomodaran a los chicos en la sala y Taehyung informó que iría a buscar unas mantas. Cuando se volvía para cerrar fue que se percató de que había un sobre blanco en el suelo y se hincó para recogerlo, solo esperaba que no se tratase de otra amistosa cartita de Orione.

Las letras en esa tipografía elegante y en color dorado al reverso del sobre le revolvieron el estómago: RM.

—¿Algún día me contarás por qué nos hemos ido detrás de esos dos en el centro comercial? —Levantó la mirada para ver a Hoseok llegar a su lado, quien le sonrió, apoyándose en la pared. Jungkook se mordió el labio inferior, lanzó un vistazo rápido al pelirrojo que terminaba de acomodar a Yoongi, y le indicó al muchacho junto a él que salieran.

—La he liado, Hobi —expresó, una vez fuera, recostándose en la puerta cerrada.

Hoseok le observó como diciéndole que en realidad no le obligaba a contárselo, pero que de todas formas esperaba que lo hiciera.

Estúpido buen corazón •⊰Taekook⊱•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora