He llegado a un nivel de limbo increíble, en el que describo como el sentimiento de estar flotando bajo el agua sin subir o bajar, pero sintiendo el frío del fondo y una presencia omnisciente que en cualquier momento me podría arrastrar a esa fosa sin vida, mientras que la superficie son esos arranques de dopamina extraña que pueden ser por una interacción con una persona creando una codependencia, cosa que quiero evitar, pero, como siempre, la dopamina es adictiva siendo caracterizada por las cosas que nuestro cerebro asocia con estímulos placenteros, y esa interacción es una de las pocas cosas logra alegrarme. Es un vacío constante, si ya antes sentía que cosas que antes me divertían o disfrutaba estaban perdiendo su toque, lo de estás últimas semanas ha sido magnífico, al punto de cesar esas actividades casi completamente. Tal vez parezca raro como lo describo como si lo glorificará, pero lo que sucede es que lo veo como una orquesta que solía provocar los mejores sonidos al punto en el que la música parecía tomar forma, pasando por los dedos de los artistas que los producían, pero ahora, poco a poco va callando, los sonidos se vuelven débiles y sin camino, llegando a lo que podría decir una muerte dolorosa y lenta en la cual la luz se va cerrando cada vez más estrecha, en dónde solo queda el maestro que mantiene su pose en espera del próximo concierto con el último reflector encima de su figura en espera de su próxima gran obra.
18/4/2021
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Thoughts of a suicidal mind
RandomUn pequeño libro en dónde pondré pensamientos de mis recaídas con las cuales te puedas identificar, y si lo haces, puedes poner un comentario y estaré dispuesta a hablar contigo. No tengas miedo de hablar las cosas que solo puedes hablar con la pare...