¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Una de las mejores salidas.
El otoño había empezado, y con él, los pisos llenos de hojas.
Por donde vivíamos solían crearse colchones de las mismas, siempre me pareció una actividad divertida y linda. Lo hablamos cuando nos estábamos conociendo, ambos coincidimos en aquello.
No pensé que te acordarías.
-Es lindo el otoño -murmuraste cansado, mientras veíamos las hojas caer-. Pero más lindo sos vos.
Mis mejillas enrojecieron y no pude evitar sonreír.
-Mira quien habla -te miré elevando mis cejas. Ahora vos también sonreías-.
-Habla el que tiene el novio más lindo, ¿Por?
-Te equivocas, yo tengo el novio más lindo.
Me miraste durante varios minutos, y luego de eso, agarraste mis mejillas con fuerza y juntaste nuestros labios.