➳❥𝕰𝖘𝖕𝖔𝖘𝖔 𝕮𝖔𝖒𝖕𝖗𝖆𝖉𝖔 || 𝕸𝖎𝖓𝕾𝖚𝖓𝖌 || 𝕬𝖉𝖆𝖕𝖙𝖆𝖈𝖎𝖔́𝖓•∞

💮𝕮𝖆𝖕𝖎́𝖙𝖚𝖑𝖔 4: 𝕮𝖚𝖒𝖕𝖑𝖎𝖒𝖎𝖊𝖓𝖙𝖔💮

Evitar malos comentarios.

『...』

No era tonto. Él sabía lo que seguía.

Cuando la fiesta acabó, JiSung comenzó a limpiar, los sirvientes lo miraban raro y trataban de decirle que lo hiciera, pero el chico no entendía.

—Creo que es sordo.

—¡Santo Dios! El señor Lee no se dio cuenta que se casó con un sordo.

—Se llama JiSung—ambos empleados saltaron asustados al escuchar la voz de su jefe—Y no es sordo. Otra cosa, JiSung es mi esposo, así que lo respetan y darán el lugar que merecen ¿entendido?

—Si señor Lee—hicieron una reverencia y siguieron limpiando.

—Tú, vienes conmigo.

MinHo lo tomó de la mano y jalo para que comenzara a avanzar, aunque JiSung no supo que le había dicho supuso que tenía que seguirlo. Cuando comenzaron a subir las escaleras y caminar por el pasillo que ya reconocía, supo lo que seguía, después de todo acababan de casarse.

MinHo cerró la puerta y comenzó a besarlo de forma salvaje, JiSung se quejaba, no quería. Escuchó un gruñido de parte de su esposo, MinHo lo empujó hacia la cama y comenzó a hablarle, al mirarle la cara de confusión y pánico, MinHo lo desudo.

JiSung apretaba las sábanas de la cama mientras sentía los húmedos labios de sus ahora esposo contra su piel, pequeñas lágrimas comenzaron a salir de sus ojos, iba a soltarse a llorar y luchar por su vida cuando recordó las palabras de JeongIn: "MinHo odia que lloren".

El miedo lo invadió, no sabía lo MinHo era capaz de hacer enojado, si nunca mostró una solo sonrisa y mostraba desinterés por él, si lo hacía enojar, quizás lo botaría y tendría que regresar a China, y quien sabe, quizás, hasta regresar el dinero para el tratamiento de sus hermanitos. Vendió su cuerpo, su alma, su propia dignidad. Se sacrificó por el bien de sus hermanitos, ellos solo lo tenían a él, JiSung haría todo por ellos, no importa que.

Trago saliva y todos sus sentimientos, en cuanto los labios de MinHo volvieron a su rostro, JiSung inició un beso ardiente, le dio acceso a la lengua de MinHo y se permitió gemir, su esposo estaba calenté y sabía que sentía placer.

Acariciaba la ancha espalda de su esposo, no tenía mal físico, no era un viejo decrépito, además, era su única salvación. JiSung trataba de convencerse de eso.

Comenzó a mover sus caderas incitandolo aún más, vio cómo su esposo se acomodaba para penetrarlo, y el solo pudo preparase mentalmente, siempre pensó que se entregaría por amor, pero los sueños solo eran eso, sueños.

En cuanto su esposo entró por completo en él, y sintió sus besos en el cuello, JiSung cerró los ojos mientras experimentaba dolor, no se acostumbraria al ritmo.

"Chang, YangMi. Esto es por ustedes"

『...』

Cuando despertó su esposo ya no estaba ahí. Se sentó sobre el colchón tratando de no llorar por el gran dolor que sentía, miró él recordatorio de su teléfono, debía ir a sus clases de coreano.

MinHo le dejó muy en claro su lugar anoche cuando lo hizo suyo y esta mañana cuando se fue olvidándolo como si fuera un objeto. Eso era para MinHo, un objeto. Alguien que solo haría lo que él dijera y que calentaría la cama su cama cuando MinHo lo ordenara.

Suspiro cerrando sus ojos y desecho los malos sentimientos que sentía. Después de todo, JiSung había aceptado esta vida.

『...』

—Bienvenido ¿Cuál es tu nombre? —dijo el chico amable del mostrador, JiSung sintió alivio al escuchar su idioma natal—Pfff ¿Para qué pregunto? Eres Lee JiSung ¿no? Dijeron que habría un alumno nuevo, y eres el único en la lista.

Lee JiSung, su apellido había cambiado.

—Sí.

—Mi nombre es Felix—sonrió ampliamente convirtiendo sus ojos en medias lunas—Puedes entrar a la sala 1, ahí está tu clase de coreano.

—Gracias.

—¿Ocupas ayuda psicológica?

— ¿Psicológica?

—Sí, si la necesitas aquí estaremos.

JiSung asintió y entró a su clase. En cuanto la clase inicio se dio cuenta de que no había avanzado mucho, iba en la tercera clase y si ponía la suficiente atención, podría llegar al nivel de sus compañeros. Una de sus compañeras se le acercó.

—Hola.

—¿Hola?—dijo inseguro.

—Yo te conozco, te vi en la agencia de matrimonio, el día que me compraron.

—¿También bienes de ahí?

—Sí , el día que fuiste a hacer la solicitud, yo había sido comprada, quería decirte que huyeras, pero no pude, lo siento.

—Descuida, necesitaba el dinero.

—¿Solicitaste ayuda psicológica?

—¿Debo?

—Bueno, no creo que tu esposo sea bueno contigo, no existen esos hombres en las agencias. Mi esposo es un cerdo de cincuenta años, yo solo tengo dieciocho, me obliga a tener sexo con él todo el tiempo —comenzó a llorar.

JiSung se levantó y acarició su hombro tratando de consolarla, varios compañeros se acercaron intentando lo mismo, la mayoría habían sido vendidas y compradas por viejos decrépitos. JiSung no se atrevió a decir que su esposo solo le llevaba nueve años y que no era tan malo como los demás, se dio cuenta de lo afortunado que había sido.

Su clase se alargó más. El profesor se quedó con él para enseñarle lo de las clases pasadas, llegó a la hora de la cena, con un montón de libros en la mano. Pasó por él comedor donde MinHo lo miró e indicó que fuera hacia él, estaba en la cabeza de la mesa, cenando en completa soledad.

—¿Tarde?

—Estudio—dijo JiSung señalando los libros—Lo siento.

—No, cenar—señaló la silla de su lado.

JiSung no era tonto, MinHo estaba utilizando palabras básicas y sencillas para tener una "conversación" con él, mordió su labio por dentro, su esposo no era malo. Sabía que quizás se escuchaba como un tonto hablando así, pero lo hacía por él por JiSung.

Se sentó a su lado y comieron en silencio. Cuando hubo terminado su comida, tomó su plato y trató de pararse, pero MinHo lo detuvo de la mano negando con la cabeza, no sabía por qué le estaba negando pararse, una empleada se acercó y se llevó todos los trastes sucios.

JiSung solo no quería verse inútil. No quería ganarse aún más el odio de su esposo.

Después de un baño y un poco de estudio, JiSung se metió a la cama, vio como MinHo entraba y se quitaba la corbata y la camisa dejándolas en el pequeño sofá de la habitación, se acomodó en su lugar y se estiró para apagar la lámpara, la mano grande de MinHo se lo impidió. JiSung lo miró, al ver como su esposo negaba y recorría su cuerpo con la vista supo de nuevo que era la hora de cumplir con su deber.

JiSung asintió y cerró los ojos.

"Lo haces por ellos JiSung, lo haces por ellos"

Se repetía una y otra vez.

『...』

Hola, esto es una adaptación, créditos a la autora @Jung_Hye_Sang_501

Muchas gracias por dejarme adaptar tu historia

ℒℴѵℯ❤︎➝Estefanía