No soy un gatito ... Está bien, soy un gatito

Capitulo 7

Les tomó alrededor de media hora llegar al área que Hagrid había mencionado. El chico se sintió mal. El hombre probablemente podría haber llegado allí en diez minutos, pero mantuvo el ritmo de Boy. Se había disculpado un par de veces, pero Hagrid le había asegurado que estaba bien.

"No hay prisa".

Chico le dio las gracias, la culpa se alivió un poco. Al escuchar un ladrido fuerte, hizo una pausa.

Ahora entendía por qué Hagrid comenzó a llamar al perro "Oso".

Bear estaba ladrando a un gran tentáculo que parecía burlarse de él.

Se dio cuenta de que estaba jugando con el calamar gigante.

El tentáculo se balanceaba alrededor de Bear, pero sin tocarlo. Bear parecía listo para saltar, moviendo la cola. Dejó escapar un ladrido feliz mientras saltaba sobre el tentáculo. El tentáculo se movía hasta que Bear se resbaló.

Aparentemente, eso era todo el juego, pensó Boy. A partir de ahí, empezaron de nuevo.

"¡Soportar!" Hagrid llamó.

Bear se detuvo, ladeando la cabeza. Al ver a Hagrid, lamió el tentáculo y corrió hacia él.

Lamiendo la cara de Hagrid por todas partes, su cola continuó moviéndose.

"Muy bien, oso. Baja. " Hagrid comenzó a limpiarse la baba de la cara.

Haciendo lo que se le dijo, Bear puso las cuatro patas en el suelo. Miró a Boy y soltó algunos olfateos. Bear se acercó a Boy lentamente, todavía olfateando. Dejó escapar un gemido, olfateando la pierna herida de Boy.

"Hola, oso", dijo Boy, acariciando al perro. "Eres el perrito más peludo que he visto en mi vida".

Cuando Bear se puso de pie, tenían la misma altura. Dejó escapar otro gemido y volvió a olfatear su pierna.

"Él puede decir que estás herido". Dijo Hagrid. "Te dije que era inteligente".

Boy quedó impresionado por el perro. "Muy bien, perrito inteligente. ¿Te gustaría quedarte conmigo?

La cabeza del oso se inclinó. Olfateando y resoplando, caminó alrededor de Boy, como si valorara su valor. Cuando se detuvo, usó su bozal para apartar la manga de Boy del camino.

Y mordió.

Aterrado, Boy trató de apartarse, pero Bear no lo soltó. Podía sentir los dientes clavándose en su piel sin romperla y la lengua lamiendo su brazo. ¡Hagrid! ¡Hacer algo!"

"No se puede hacer nada". Hagrid dijo, sonando asombrado. "No creo que tuviera magia. Lleno de sorpresas, ¿eh, Bear?

El chico no quería golpear al perro, pero no lo soltó. Cuando finalmente decidió que no podía hacerlo, Bear dejó que su brazo se deslizara fuera de su enorme mandíbula. Tenía hendiduras en los dientes, pero no le había sacado sangre. Bear lamió la 'herida' por todas partes y las sangrías se llenaron, dejando una marca roja. Casi parecía que lo habían tatuado en la piel. Jadeó. "¿Hizo lo que creo que hizo?"

"Parece que te conseguiste una mascota, Little Mite". Hagrid dijo felizmente. "¡Te ha dado la marca familiar!"

Chico sonrió. "Entonces, perrito. ¿Eres mi familiar, ahora?

Bear ladró, moviendo la cola a una milla por minuto. Se dejó caer al suelo y tiró suavemente de la capa de Boy.

No tuvo que inclinarse para acariciar la cabeza de Bear, pero Bear quería algo más. "¿Sabes lo que busca?"

"Can" dice que sí ", respondió Hagrid con curiosidad, rascándose la barba. "Solo estaba bromeando acerca de montarlo como un pony, pero podría ser así".