B L I N D G A M E I I

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Qué es lo que pasó hace dos noches:

Neji había oído el rumor que un chico x iba invitar a salir a su compañera. Obviamente eso era imposible. Y no era que él estuviera celoso; sólo que ese idiota no era ni siquiera un ninja importante, es decir, no era jounin todavía. Tenten se merecía algo mejor, no sé... Quizás un ninja talentoso, con buena reputación y de buena familia, quién sabe; una con linaje, con estatus en la aldea e historia. Además que si su compañera tenía novio, eso le afectaría a él. ¡Y no porque estiviera celoso! ¡No! Mas bien porque entonces la kunoichi estaría todo el tiempo distraída y si Tenten estaba distraída, el equipo se iba al demonio, literal. Y eso no era todo; porque él era el que más perdía en todo ¡No por celos! Sino que ella practicaba con él desde siempre.
Esas eran las reglas: las bestias verdes por una lado y Tenten y él, por otro. ¿Que si podían cambiar? ¡Claro! Pero hasta congeniar con Lee en batalla y adaptarlo aún buen grado de Taijutsu.... No.
Tenten no podía tener novio.
No a menos que ese novio fuese muy hábil en Taijutsu como él mismo, ya que no quería que su compañera bajara de nivel cuando ambos se fueran a enfrentar.
¡Ven! Todo era por su bien y no por esas ridiculeses de celos o sentimientos.

Bueno, físicamente hablando; Tenten se había puesto más deseable a la vista pero eso era justamente el problema: su pareja tendría que ser igualmente guapo y sexy para que no mal combinen. Aparte, el indicado debía tener porte, elegancia y clase. CLASE. Por. Sobre. Todo: no podía ser un idiota inseguro y celoso que apartara a Tenten de ellos; pues ella era libre e independiente.
No necesitaría que un enfermo la quisiera cambiar; ella era: amable, sonriente, carismática, cambiante, inteligente, decidida, despreocupada y hermosa.
Y ese era otro problema. Si 1010 elegía a alguien inseguro, buscaría controlar su manera de ser, su manera de actuar, su forma de vestir; ¡y eso sí que no! Si ella quería usar esas blusas sin mangas con escote -que ahora usaba- ella tenía todo el derecho. Nadie debía negárselo. Ella podía usar la blusas chinas que quiera, mantener los brazos y la espalda descubierta como últimamente llevaba, ponerse esos mini shorts oscuros (sin mayas) que se moldeaban a la piel y dejaban al descubierto unas lindas y largas piernas que a cada paso llamaba la atención de cualquier persona....

El punto era que ella era su Tenten. SU Tenten. Y nadie estaba a su altura ¡nadie! Ni siquiera el bastardo Uchiha que de un tiempo para acá se aparecia muy seguido por ahí haciéndose el  shinobi regenerado... Naruto no era opción, el idiota si es que se acordaba de la existencia de Hinata; y Lee... Lee ni siquiera era opción.

Aquí el problema era el importunista de ese Shinobi "x" que venía a quitarle a Tenten... Pero no estaba enojado por celos, eso ya ha quedado claro.

Sucedió entonces que el "x" había corrido la noticia y se disponía a buscarla para salir, por eso él, heredero del byakugan y mejor represetante del clan Hyuga, hecho una furia la rastreó por toda la aldea e impaciente por hallarla recurrió a activar su kekkei genkai.

Luego de horas de búsqueda incansable no la encontró.

Exasperado, se volvió a la mansión Hyuga para tomar un baño de agua bien fría a ver si así se le pasaba el coraje y la incertidumbre.

Ya en la noche:
Ni saludó a Hiashi-Sama. Por él pudo haber caído la Luna a la Tierra y ser el último día de su vida y a él le importaba un Uchiha...

Ignoró a todo y a todos y sólo saludó a Natsu para pedirle una bata de baño.

El complejo más antiguo en Konoha era también el más rico; no era de extrañar que sus baños parecieran saunas divididos sólo por una pared delgada de madera que no venía al caso porque todos allí usaban el byakugan.

Entonces al llegar se extrañó al oír ruidos en el baño de la sección de hombres.

Como naturalmente haría abrió las puertas deslizables de un solo movimiento, pensaba que era algún otro Hyuga tomando el baño; pero la sangre se le bajó cuando al frente encontró a Tenten en el momento justo cuando se abría la bata, cara cara frente al Hyuga joven y de su pecho saltaban unas... unas...
U-Unas re-redon... redondas...

BLIND GAME | NejiTen Donde viven las historias. Descúbrelo ahora