El Destierro de los Condenados Capitulo 1
Destino. Andrew corría descalzo y sucio por las calles casi vacías con una botella de alcohol en las manos. Su largo cabello dorado estaba cubierto de barro y mugre, su rostro era un poema mal redactado de golpes, mocos y lagrimas que nunca corrieron, pero a sus siete años tenía que abastecer de alcohol a su padrastro de turno y a recoger las hojas con olor extraño que volvían a su madre más ausente de la habitual, pero al menos de esa manera era feliz por poco tiempo, por un tiempo en el que a su corta edad pensaba que eso era la felicidad y era lo que se suponía ser amado.
Faltaban pocas horas para que fuera su cumpleaños, eso lo había dicho la mujer que le daba la comida, al menos una vez al día a escondidas de su esposo y su familia, pero nada más; aquella mujer con seis hijas no podía adoptarlo por que era hijo de una prostituta que dicen que antes que el pequeño naciera era la flor más cotizada de todo París; pero ahora marchita y acabada sólo podía abrir las piernas para gente que no podía ofrecerle mucho por sus servicios, pero eso era mejor que nada pensaba la mujer que muchas veces se había detenido a observarla fijamente, para encontrar en ella aquella mujer de la que decían las "leyendas" y algunas veces en efecto la encontraba, pero era demasiado para ella... y volvía a su casa suspirando porque aunque ella tuviera una familia feliz y envidiable, jamás se sintió lo suficientemente mujer al no poder darle a su esposo un sucesor, alguien que llevara el nombre de la familia a otro nivel y siguiera con la tradición familiar de ser los médicos del pueblo, pero tampoco nada pudo hacer cuando aquella madrugada en la cual volvía de una fiesta en la casa de sus suegros vio al pequeño Andrew correr, entregar su decadente encargo y luego salir volando por los aires y dar contra el árbol al frente de su casa, según los gritos que aquella mujer, su propia madre por que el niño se había demorado en volver.
Andrew no despertaba, su respiración era agitada y aunque quería correr a auxiliarlo su esposo la detuvo y la aferro con fuerza de la muñeca y la metió a la casa, se quedo pegada en la ventana mordiéndose las uñas para ver en que momento despertaba o se movía, pero aquella fría madrugada, aquel niño con ropa pequeña para su tamaño simplemente no despertó y derramando lagrimas involuntarias rezó fervientemente para que su agonía terminara y al fin tuviera la dicha de la muerte... una dicha que para su desgracia no pudo ser, por que en medio de la noche un lujoso auto se estaciono fuera de la casa y un hombre joven salió vestido completamente de sastre y con un guardaespaldas al lado; miró al pequeño Andrew y lo llevo a sus brazos, el guardaespaldas entró en la casa y tras unos gritos vio como el nuevo amante de turno salió volando por los aires y dando de cabeza contra el árbol en el que antes Andrew había quedado inconsciente, pero esta vez la mujer salió llorando y maldiciendo y tras balbuceos y frases incomprensibles vio como aquel hombre joven se llevo al pequeño Andrew como forma de pago; aunque la mujer juro que pagaría su deuda una y otra vez hasta que su marido despertó cubierto de sangre y tras un fuerte golpe todo se volvió oscuridad para ella.
- Charles es tiempo de despertar- dijo la habitual vos de Jonatan, que una vez mas lo había ido a buscar a la sala de música, lugar donde iba a dormir cuando quería estar solo o Jonathan necesitaba la habitación. El pequeño Charles abrió los ojos un poco aturdido, había tenido que tomar de aquella bebida que August le daba a Jonathan y tras ser obligado a tomar un vaso entero se sintió mareado y cansado, de hecho ni siquiera había podido terminar leer y solo se durmió.- Jon tengo sed- susurro Charles que no hablaba con nadie exceptuando Jonathan, el profesor de literatura y el jardinero y aunque solo fueran pequeños susurros... era más de lo que alguno podía decir.
Jon de trece años ayudo a Charles de ocho a levantarse... ambos habían estado toda su vida en ese exclusivo internado, incluso en vacaciones y ambos con un par de chicos más eran los llamados "sin hogar", pero ese año August volvió después de cuatro años y aunque nadie sabia y Charles no entendiera, visitaba en secreto casi todas las noches a Jon.
Charles recordaba que la primera vez que volvió casi al amanecer por que se había quedado profundamente dormido en el sleeping que le había dado August, encontró a Jon desnudo tumbado en la cama, con los ojos abiertos y llorando, su pálida piel estaba cubierta de marcas y moretones que el pequeño Charles no le había visto y al prender la luz para tener una mejor visión se asusto al ver a August salir del baño privado acomodándose el pijama con el cabello aún mojado y en el rostro la forma de una mano marcada.
Cuando Charles se acerco a Jon y el lo vio, volvió a llorar desconsoladamente, ante la atónita mirada del niño que no entendía que le pasaba a la persona que había sido su familia por todos esos años... pues Charles simplemente no tenía a nadie mas que a Jon.
August estaba frio y distante, levanto una ceja y siguió su camino con un: "Vuelvo mañana". Cuando cerro la puerta Jon se paro de un salto, pero cayo al suelo... Charles pensó que se sentía enfermo y casi se infarto cuando vio la sangre en el cuerpo de Jon... pero él se volvió a levantar y caminó hasta el baño a duras penas y tomo una larga ducha...
Charles estaba desesperado y se echó a llorar en silencio. No supo que paso después no supo que Jon se termino de bañar y tomo las sabanas con sangre y sus pijamas destrozadas y las quemo en el incinerador. No supo que Jon ese día había sido violentamente violado por August y que la situación se repetiría incontables veces... No supo que en secreto Jon había amado a August por muchos años y que había sido inmensamente feliz cuando volvió y tampoco supo que a partir de ese día en el corazón de Jon un agujero negro empezó a crearse... Charles nunca se enteraría de muchas cosas porque Jon así lo quería pues era lo mejor que podía hacer por aquel niño que era hijo de un barón con una amante que murió al nacer y si estaba ahí era por que era el único hijo hombre de aquel Barón y las demás fueron solo mujeres, pero el tampoco tenía un mejor destino, era hijo de una irresponsable madre soltera... que a su corta edad ya tenía un hijo con la mitad de su edad, veintiséis para ser exactos y ya se había casado tres veces.
- Madre- le dijo una vez... la única vez que ella lo había ido a ver en cinco años y lo único que recibió fue una bofetada en el rostro y un leve corte en la mejilla izquierda por el anillo de compromiso de diamantes. Jon esa noche nunca pensó en morir ni en el dolor... la verdad era que no le dolía, era como si su alma y su cuerpo tuvieran anestesia.
Pero esa noche... en la quemo esas ropas destrozadas y esas sabanas llenas de sangre mientras Charles dormía por tanto llorar... Jon sintió que en realidad se quemaba a si mismo, a su alma y a su cuerpo y aquello que pensó que no tenía. Jon esa noche se hizo un par de heridas que no fueron provocadas por August.Jon esa noche solo quería dormir..