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Pov. Lisa

El sonido de la alarma que sonaba por toda la habitación indicaba que eran las 6:00 a.m la hora en la que solemos despertar. La apagué y me voltee a ver a Rosé quien parece ser que no escuchó la alarma.

— Amor ya despierta — le decía mientras apartaba el cabello de su cara para verla mejor.

-Buenos días- comentó ella mientras me abrazaba.

-¿Dormiste bien?- pregunté.

-Como un bebé.

Iniciamos una ronda de besos tiernos para que nuestras ganas de querer seguir durmiendo se fueran hasta que Rosé se levantó para ir a bañarse mientras yo organizaba la habitación.

- Ya puedes entrar- me dijo mientras salía del baño con una toalla al rededor de su cuerpo y una en su cabello.

-Ya voy.

Cuando terminé de bañarme entré a la habitación y ella ya no estaba supose que fue a hacer el desayuno. Me vestí con una camisa blanca y pantalones negros con una suave capa de maquillaje. Bajé a la cocina donde Rosé se encontraba haciendo el desayuno vestida con unos pantalones blancos y camisa roja que hacía juego con su cabello. Ella al notar mi presencia volteo a verme.

- Que hermosa te ves- me dijo mientras servía el desayuno.

- Y tú no te quedas atrás- me acerqué a ella para darle un rápido beso en sus labios provocando una risita de su parte.

- ¿Hoy irás a la oficina?- me preguntó mientras servía el desayuno.

- Si, ¿Tu irás al estudio?- tome asiento en la mesa donde Rosé estaba poniendo los platos con la comida.

- Si, pero antes iré donde mi estilista a agendar mi cita- decía mientras se sentaba al frente de mí.

- ¿De que color lo pintarás?- le pregunté- Te dije que es una sorpresa- me respondió.

- Pero- ella no me dejó terminar de reclamarle porque me había callado con un beso.

-Te gustará- fue lo que me dijo.

El desayuno había transcurrido con normalidad hablando de uno que otro tema sin importancia. Ya habíamos llegado a mi oficina y estábamos en la entrada.

-Te amo- le dí un beso para bajarme del auto y pude escuchar un "también te amo" de su parte y sonreí como la más enamorada.

Pov. Rosé

Iba manejando de camino a mi estilista para hablar sobre el tema de mi cabello y estaba muy emocionada ya no podía esperar más quería ver la reacción de todos. Llegué y cuando bajaba del auto dos personas me hablaron para sacarnos una foto y acepté dichosa, el hecho de que me pidieran fotos en la calle no era una molestia para mí, todo lo contrario. Entré y hablé con mi estilista y quedamos para el jueves por la mañana.

Ahora me encontraba en mi estudio donde tenía una cita muy importante para hablar sobre mi próximo álbum del cuál también estaba muy emocionada y debo admitir que una de las razones por las que quise cambiar el color de mi cabello fue por eso.

La reunión había terminado y ¡Oh por Dios! Habíamos quedado en que si sacaría mi nuevo álbum próximamente. Era hora del almuerzo así que llamé a Lisa para ver si estaba desocupada y poder reunirnos a almorzar.

- Hola- escuché del otro lado de la línea.

- Amor ¿estás ocupada para ir a almorzar?- le pregunté.

- No, te espero en el restaurante de siempre. Te amo.- respondió

- También yo.

Pov. Lisa

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