LAS ARENAS DEL AMOR

Capitulo 3

Narra la Archiduquesa Catra

Ya me bebí toda la botella de vino. Necesito más licor. Mi mente no puede sacarse de la cabeza a esa estúpida y... desgraciadamente hermosa, rubia. Mis manos tiemblan porque mi corazón sigue latiendo rápido. Sacudo mi cabeza por tercera vez con la intención de sacármela de los pensamientos.

La recuerdo de hace meses, ella me llamó la atención, pero no podía hacer nada. Tengo una reputación que mantener así que no puedo verme como una mujer amable y mucho menos como una heroína.

Alguien toca la puerta de mi habitación.

- Adelante.

La puerta se abre revelando a Lonnie, mi mayor confidente, ella es una experta en buscar todo lo que deseo. La morena de ojos dorados como el oro me saluda al estilo militar.

- ¿Me mandó a llamar mi señora?

- Ya tengo los nombres de las esclavas.- Le paso una hoja con los tres nombres.- Quiero que las investigues, pero la prioridad es la del nombre Adora Weaver.

- Como ordene. Mañana antes de partir le traeré la información.

- ¿Y averiguaste lo otro?

- Así es. El Duque murió a causa de la epidemia. La misma que azotó hace algunos años.

- Si.- Digo recordando de que ese fue un periodo bastante grave en todos los reinos. Inicialmente se propagó entre los pueblerinos pero ahora se reactivó e inició por la nobleza. - ¿Hay más casos con personas que tengan la peste en este asqueroso lugar?

- No, no hay más casos, lo raro es que el Duque era el único.

- Tal vez alguien lo mató. Después de todo se a confirmado que se puede implantar la peste en una persona. La pregunta es quién.

- La más obvia sería la duquesa.

- Esa mujer no tiene las agallas. En fin, eso ya no importa. Vayamos a lo que nos interesa.- Extiendo mi mano y ella me da un documento en donde le quito el 70% de la deuda, ahora solo deben pagarme 25.000 monedas de oro. ¡Que horror! Que todo sea por cambiar la vida de alguien.- Entrégale esto a la duquesa. Ya está firmado. Mañana nos vemos antes de partir.

- Buenas noches mi señora.

Al ella salir, me recuesto en la cama al lado de Melog, mi amigo fiel, él es una criatura mágica, puede cambiar de tamaño cuando lo desee.

- Un asesinato. ¿Solo eso? Que aburrido lugar.

- ¡Miauuu! - El me habla regañándome por haber dicho eso, yo solo le resto importancia.

...

Al amanecer.

Me estaba terminando de arreglar, me miré en el espejo detallandome, llevaba un pantalón negro con largas botas negras y una blusa pegada al cuerpo color rojo. Quiero partir lo más rápido posible, no soporto más este lugar.

Melog se estira para desperezarse y le pongo un poco de su comida que siempre cargo para situaciones como esta. Alguien toca la puerta, y creo saber quién es.

- Buenos días mi señora.- Lonnie entra y cierra la puerta.- Le averigüé lo que quería. ¿Quiere que empiece por la primordial?- Asiento en respuesta y la miro expectante.- Era la hija de un Barón, él murió a causa de la epidemia, tenía deudas y la esposa no supo cómo llevar la deuda por lo que terminaron peor. La salvación la encontró cuando apareció el Duque y fue vendida al tener 14 años. Le pagaban una mensualidad a la madre por los servicios de la chica hasta que el Duque falleció.