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II

"Si hay atracción por su alma antes de tocar su piel, es real"
—Ron Lorent

-¿Gerardo Diego?-

Preguntó un tono más agudo el rizado y cruzando los dedos tras su espalda. Louis cogió otro chocolate que le había robado a Harry de la cocina y le miró serio.

Van Gogh maulló.

-No-

Harry gruñó desesperado y echó su cabeza hacia atrás del respaldo, mientras tanto Louis negaba con la cabeza en silencio.

-Me rindo, ya no sé que hace-

Exclamó exhausto. Louis sonrió de lado y se chupó las yemas de sus dedos manchadas de chocolate.

Se bajó de la cama para acercarse al escritorio de Harry donde había miles y cientos de papeles y subrayadores por doquier. Louis frunció el ceño confuso por tanto desorden y negó con la cabeza mientras apilaba todos los temas a un lado.

-Mira vamos a hacer esto-

Se inclinó en el escritorio repartiendo de forma ordenada los temas correspondientes y escogiendo diferentes colores del estuche del rizado.

Harry miraba en silencio cómo colocaba todo de forma minuciosa y sentía derretirse con su perfecto perfil, desde sus finos y rojos labios, sus largas pestañas, e incluso su pequeña nariz similar a un botón.

Louis mordió su labio inferior concentrado y el mayor no pudo evitar suspirar.

-Bien—se volvió a alejar y observó con una sonrisa la mesa—Estudiarás por colores, por ejemplo, el modernismo será en azules para que tu cerebro pueda relacionar los nombres escritos con azul con el tema correspondiente-

Harry mojó sus labios enfocándose en el surtido de colores de la mesa y asintió un poco indeciso por aquel método.

El ojiazul volvió a sentarse en la cama de Harry le miró entretenido mientras el rizado proseguía a intentarlo una vez más con las reglas de Louis.

Miró el calendario dándose que tenían seis clases juntos antes de su examen, y haría lo que fuera porque Harry aprobase para tener su cita. Quiero decir para que Harry pueda aprobar con buena nota, su cita era lo de menos por supuesto.

Al cabo de unos minutos el teléfono de Louis comenzó a sonar por toda la habitación, le dio una mirada de disculpa a Harry y descolgó la llamada.

-¿Hola?-

-Hola buenos días—dijo con amabilidad la voz de un joven chico—Soy Ross, el encargado de Robertinno's, ¿eres Louis cierto?, he visto que nos has dejado tu currículum para el puesto de trabajo-

Louis abrió los ojos al recordarlo y sonrió con incluso comenzó a dolerle la boca.

Harry le miró de reojo con el ceño fruncido y fingió seguir copiando los apuntes, cuando en realidad pretendía escuchar todo.

-Oh claro, si, uhm...soy yo-

Comentó soltando una risita.

-Perfecto—sonó más feliz que él—Por favor ven cuando puedas para ver la experiencia que tienes, que tengas un buen día-