❝ 𝐎𝐍𝐄 𝐌𝐎𝐍𝐓𝐇 ❞ | Donde Intak gusta de Jiung y le empieza a enviar cartas.
O donde Jiung empieza a recibir cartas de manera anónima y se propone (junto a su mejor amigo) descubrir quien estaba tras esas hermosas letras.
ㅤㅤ ↯ ꒱ historia 100% or...
Hola de nuevo JiUng! Sip, soy yo de nuevo. Tenía razón, ayer cuando recibiste mi 1ra carta pensaste que fue una broma de alguno de tus compañeros, ¿porque? Bueno, realmente no importa. Ahora que recibiste otra carta de mi parte, debo suponer que ya no crees que mis sentimientos hacia vos sean una broma, verdad? ¿Sabes?, aún siento un poco de vergüenza al demostrar mi amor por ti, incluso aunque sea detrás del "anónimo" a través de un papel, es que cada vez que escribo el pensamiento de ser rechazado por ti me come completamente la cabeza y me nubla la mente, igualmente me pasa cuando te veo o me saludas, simplemente no puedo ocultar algo que cada día se va haciendo más grande y el que aún no me anime a decírtelo cara a cara me pone triste y hace que me sienta como un idiota.
Atte: Anónimo.
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JiUng se quedó estático mirando y repasando aquel pedazo de papel una y otra y otra vez, pero la voz de Theo lo trajo de nuevo a la realidad.
—JiUnggie! JiUnggie!—le gritaba al menor.
—Que que, ¿Que pasa Hyung?—le preguntó mientras lo miraba confundido.
—Déjame adivinar: ¿Tu hermana te maquillo mientras dormías...otra vez?—preguntó cruzándose de brazos.
—¿Que? No!—respondió—¿Por qué preguntas?.
—JiUng, literalmente tienes la cara completamente roja—contestó—¿Está seguro de que no jugó con el rubor en tu cara?—preguntó nuevamente.
Al escuchar eso, el menor sacó rápidamente su celular y abrió la cámara para ver que, efectivamente, estaba completamente rojo.
Seguro que los tomates lo envidiarían.
—¡No-No es maquillaje!—se quejó, tapándose la cara.
—¿Y entonces?—preguntó confundido y al ver cómo un pedazo de papel se asomaba por las manitos de JiUng lo agarró y lo abrió—¿Enserio? ¿Por esta estupidez parece una manzana? Vaya, cada vez superas mis expectativas con respecto a tu estupidez—dijo y recibió un golpe en el brazo por parte del menor.
—¿No puedes dejar de insultarme...al menos cinco minutos?—preguntó, agarrando la carta y metiéndola en su mochila.
—Eso, mi querido amigo, no es amistad—contestó con una sonrisa.
Para Theo, la amistad era insultarse cada 2 segundos sin ofenderse o enojarse.
MÁS TARDE ESE DÍA.
JiUng y Theo habían salido más temprano del aula debido a que la clase terminó unos minutos antes, por lo que no les costó mucho conseguir una mesa en la cual sentarse y empezar a hablar mientras cada uno comía lo que había traído (Aunque bueno, la mayor parte de la comida de Theo siempre terminaba en el estómago de JiUng). Cuando ambos estaban terminando de comer, la voz de una de sus compañeras se logró escuchar.
—¡JiUng!—dijo la chica y a paso rápido se acercó a la mesa donde se encontraban ambos chicos.
—JiMin, ¿Ocurre algo?—preguntó amablemente.
—Oh, bueno. Te olvidaste esto—contestó.
Ahí, la chica estiró sus manos revelando una cajita de color rojo con un lazo dorado y unas letras difíciles de leer.
—Oh—soltó, sorprendido—JiMin noona, eso no es mío—le dijo, señalando la caja.
—Bueno, pero tenía un papel con tu nombre así que...—dijo y apoyó la caja en la mesa para luego sacar un papel del bolsillo de su buzo y apoyarlo sobre la caja, quizás este se hubiera despegado.
Luego de eso, JiMin se despidió y se fue, dejando a los dos amigos confusos mirando la cajita.
—¿Que cree que sea, Hyung?—le preguntó al mayor.
—No lo sé, pero la curiosidad me puede—contestó.
Entonces el menor la agarró y se quedó viéndola por unos instantes, hasta que decidió abrirla.
Al hacerlo, encontró unas gomitas de distintos sabores y al fijarse un poco mejor en la tapa, vio que había una nota en la parte de adentro.
"Espero te gusten, aunque bueno, se que son tus favoritas.
Atte: Anónimo."
—Hyung mire!—Dijo, mostrándole la nota mientras agarraba uno de los dulces y lo comía.
—Wow, al parecer ese chico te conoce bien. Ni yo sabía que estos eran tus dulces favoritos—comentó, mientras observaba como el menor releía la nota con un pequeño brillo en los ojos—Estás enculado, ¿Cierto?—preguntó y no se sorprendió cuando vio a su mejor amigo asentir felizmente.
Definitivamente ese sería el ÚNICO tema del cual hablarían durante mucho, mucho tiempo.
