｡ﾟ･ ♡̸̸ ﾟ･𝐇𝐀𝐘𝐋𝐎𝐅𝐓 : johnten

🚬˖ ݁❟ 我留白你 ⊹࠭𓂃

el día de la graduación parecía una meta que llevaría mucho tiempo. más sin embargo llegó hacia ellos, algo que no quería que pasara.

todos estaban más que felices, ya no más universidad ni más maestros torturadores. solo les quedaba una vida independiente de adultos para demostrar  todos esos años de enseñanzas que tuvieron.

johnny estaba más que feliz y ten, él estaba con la mente vagando.

cuando la reunión de graduación terminó su grupo de amigos decidió salir a bares cercanos para pasar tiempo, con la excusa de que pronto no se verían cuando todos trabajen. dos, tres, cuatro bares visitados tal vez hasta más, chittaphon dejó de contarlos cuando entró un poco al ambiente del lugar. aunque se había rehusado en tomar sus amigos lograron animarlo un poco, todo el mundo noto la melancolía de él tailandes y eso ponía a todos deprimidos.

no estaba en estado de ebriedad, claro que no, sólo se dejó ir y se relajó dejando atrás sus pensamientos. aún le quedaba tiempo.

— ¿irás con tu mamá? — preguntó mark lee para después tomar un trago.

ten negó — mi papá se negó — sonrió — me quedaré aquí un largo tiempo.

johnny dejó el pequeño vaso en un golpe — tennie y yo viviremos juntos cuando consiga un trabajo fijo.

el grupo de amigos comenzó a tirar cumplidos por el grande logro que cumplirán como pareja. eso hizo sentir tímido a ten pero sentía ese típico calor en el pecho de emoción tan solo pensar en ese futuro. cuando johnny tomó su mano debajo de la mesa  y acariciaba el anillo en su dedo de matrimonio sintió todo su ser derretirse del amor, estaba loco por ese americano, lo quería para toda su vida.

las horas pasaron y ya todo el mundo estaba muy ebrio. jaehyun y doyoung llevaron a mark muy ebrio hacia el departamento del segundo, sin hablar que sólo uno de ellos estaba consciente.

mientras tanto la pareja se fue totalmente bien, tomados de la mano, y disfrutando su caminata.

— apuesto que mark te llamará en su resaca para que lo acompañes con doyoung — habló john.

— y yo que planeaba descansar todo el día — chittaphon negó riendo.

de pronto el alto detuvo su caminata haciendo que hiciera lo mismo. ten volteo a verlo curioso. — te veo algo decaído — se acercó tomándolo de su mentón — ¿no me dirás?

ten se acercó hasta besar sus labios — sólo pienso en nosotros.

— ¿algo malo en particular?

negó con una sonrisa — sobre nuestra vida más adelante, me imagino como sería y me emocionó mucho. pero a la vez me asusta, de tal vez no poder estar contigo siempre, no quiero que estés solo.

john acarició sus mejillas — nada te pasará, solo seremos tu y yo. para siempre.

chittaphon lo beso nuevamente moviéndose sobre sus labios y acariciando su cabello.

— no me quiero ir aún — el alto susurró sobre sus labios.

¿en qué momento llegaron a su casa? nunca entendía cómo llegaba siempre a ese lugar y tenía que despedirse de su amado. miró su hogar con una mueca, el tampoco quería irse.

— pero tienes, amor, mi padre...

— tiene un arma — johnny rió — ya lo se tennie.

el mayor le sonrió antes de dejar un último beso en sus labios. — gracias por entender.

ten se despedío a lo lejos una vez en su entrada, cuando se aseguró que su novio estuviera lejos entró a su hogar. cerró con cuidado la puerta mientras se retiraba las zapatilla en silencio, camino con cautela por la sala intentando hacer el mínimo ruido, todo eso fue inútil.

la luz de la comedor se encendió haciéndole brincar del susto.

— es tarde, chittaphon — habló una grave voz desde el lugar.

el pelinegro mordió su labio — perdón... papá, fui a tomar con mis amigos y pasó muy rápido el tiempo hasta que no me di cuenta.

unos pasos pesados se escucharon hasta que se dio la silueta de el adulto.

— lo vi — el señor se cruzó de brazos — no necesito su nombre, lo sé todo.

ten sintió un dolor en su pecho y su mirada se nubló así como el nudo creció en su garganta — ¿a sí?

él asintió — ve a dormir cielo, debes estar cansado.

pero ten sólo se trago todo. el menor sonrió de oreja a oreja y se acercó hasta  su padre dejando un beso en su mejilla.

— buenas noches papá.

estaba aterrado.