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JiMin golpeó la puerta de aquella enorme casa, mientras TaeHyung llamaba al timbre repetidas veces. Ambos amigos acababan de llegar a casa de SeokJin, creían que se perderían al llegar, pero era imposible, la música resonaba en toda la calle, las personas en el jardín bebiendo y bailando, las risas, los gritos, era obvio que en aquella casa se estaba dando una fiesta, la fiesta de SeokJin.

-¡Hyung! 

Gritó JiMin cuando SeokJin abrió la puerta, y rápidamente los tres amigos se fundieron en un abrazo.

-Me alegro de que hayáis venido, podéis dejar las chaquetas en la entrada.

JiMin asintió a las palabras del mayor y dejó caer su chaqueta de cuero en el suelo de la entrada, quedando en una camisa blanca algo desabotonada y unos pantalones de cuero negro, que se ajustaban perfectamente a sus muslos, cadera, y cintura.

"Sexi", Había pensado TaeHyung cuando había visto a su mejor amigo. Él había optado por una camisa de estampado desabotonada hasta el pecho y unos pantalones rectos, y, por supuesto, su péndulo de amatista colgado al cuello y su baraja del tarot en un bolsillo.

-¿Hay vodka?

Gritó JiMin por encima de la música. "En la cocina" Gritó SeokJin, y rápidamente se dirigió a esta, perdiendo de vista a su mejor amigo.

Tomó un vaso de plástico y se sirvió su bebida, cargándola bastante de alcohol, como le gustaba. Miro al otro lado de la sala a su amigo TaeHyung, el cuál se encontraba hablando con JungKook, el hermano menor de SeokJin.

Podía notar como ambos se comían con la mirada, y una mueca se formó en su rostro cuando JungKook colocó una mano en la cintura de TaeHyung.

Se fijó en el menor. ¿Qué diablos comía ese niño? Sabía que JungKook tenía 16 años, era menor a él, pero Dios, le sacaba poco más de una cabeza de altura, se le veía musculoso, y su rostro era bastante hermoso, ¿Qué comían los niños de hoy en día? Estaba seguro de que le preguntaría su secreto para crecer.

-¿Uh? ¿Qué signo me habías dicho que eras?...

Preguntó TaeHyung al menor con una sonrisa de lado, colocando sus brazos en el cuello de JungKook.

-Oh, Virgo, ¿Por?

JungKook lo miró confundido, pero TaeHyung sólo se acercó a su oído con una pequeña sonrisa.

-Eso me gusta...

JiMin tuvo que desviar la mirada y darle un gran trago a su bebida al ver la escena, sintiéndose algo asqueado, sin embargo una vocecita algo aguda lo sacó de sus pensamientos.

A su lado se encontraba una chica más baja que él, de cabello de rubio y rostro hermoso. La reconocía de haberla visto por los pasillos, era una chica de primer año, aunque nunca habían intercambiado palabras.

-Perdón, ¿Qué decías? Estaba distraído.

Habló el chico, dando otro trago a su bebida.

-Te decía, que qué haces aquí solo, la fiesta no es en la cocina.

La rubia rió levemente, preparándose una bebida.

-Oh, creo que me quedé algo embobado con mis pensamientos. ¿Y tú? ¿Qué haces en la cocina también, eh..?

JiMin alargó la vocal, esperando que la chica se presentase.

-Yuna, soy Yuna. Vine a prepararme otra bebida.

-Oh, bonito nombre yo soy Ji...Min.

JiMin alzó una ceja cuando cayó en cuenta. ¿Yuna? ¿Había dicho Yuna? Ese nombre empezaba por Y, igual que la chica que le mandaba cartas. ¿Podría ser ella? quizá le mandaba cartas porque era demasiado tímida.... ¿No?

Amarre [Yoonmin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora