CAP 8 - LA LEYENDA

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A la mañana siguiente las seis enanitas se dirigieron hacía el camino que llevaba directo al oráculo. Las enanitas estaban muy contentas, tenían dinero, habían dormido bien y habían estado en una ciudad maravillosa.

Cuando hubieron dejado atrás la ciudad y se adentraron a las grandes extensiones de campos de flores, pudieron ver por fin la torre de luz del oráculo. Era una columna luminosa color amarillo que bajaba de los cielos y caía sobre un punto, el oráculo.

Contentas y corriendo se dirigieron hacía el oráculo a través de un millón de flores. Pero algo les pasó a toda velocidad a su lado. Una gran oca les había avanzado por la derecha y se dirigía hacia el oráculo.

- Que narices ... - Sora resopló

-Mirar! - Ans señaló una casita - alquilan animales de transporte! Miramos a ver?

-Para que? - dijo Siva

-Y si alguien llega antes que nosotras al oráculo? - dijo Ans

- Cierto! Vamos

EL puesto era una una casita de piedra junto un establo con una decena de animales diferentes, ocas gigantes, conejos gigantes, hasta un lagarto gigante.

- ¡Bienvenidas niñas! - un enano del bosque salió de detrás del establo - que queréis?

- Queríamos un transporte - dijo Kona

El enano miró a Skai. Este se escondió detrás de Mer

- Y el perro de las nubes ese? es que no sabe volar o que?

- Aún no, es muy pequeño - dijo Mer

- Pequeño mis cojones - el enano se colgó el trapo en el hombro - déjame ver

Se acercó a Skai y le palpó la espalda

-Está de maravilla. Es jóven pero debería saber ya volar - el enano le estaba mirando las patas

-Es que no tenía padres cuando lo encontramos, nadie le ha enseñado aún - Mer le acariciaba el hocico

El enano suspiró.

- ¿Tenéis prisa para llegar allá dónde váis? - dijo el enano

-La oca de antes, dónde iba? - preguntó Siva

- Ah esa, se escapó - sonrió el enano - es lo peor que hay. Por aquí hace semanas que nadie pasa. Menos después de la ola expansiva que hubo

- Entonces no tenemos prisa - dijo Sora

El enano silvó y de una gran aguila apareció de las montañas.

- Esta es Lola - acarició al pájaro - ella enseñará a volar al perro

- ¿Como? - dijo Mer

- Lola se quedó sin hijos hace muchos años y cada vez que llega algún animal nuevo al santuario ella los trata como hijos - dijo el enano - dejaremos que están juntos todo el día de hoy. Creo que por la tarde ya debería saber volar.

- Pero - Mer no entendía nada

- Que si mujer, tranquila, deja al perro y venir conmigo

Mer dió un paso hacia atrás y miró a Skai.

- Portate bien anda

Las enanitas siguieron al enano del bosque mientras Lola se llevaba volando a Skai.

- Pasar un rato y tomar algo de té - dijo el enano

-Gracias - dijo Sora sentándose en la mesa.

-Váis hacía el oráculo, no? - dijo el enano sirviendo té

-Sip - dijo Ira

-Así que habéis escuchado la leyenda no?

-El que ? - preguntó Ans - vamos a mirar solo

El enano se sentó en su sillón.

-Anda, dejarme explicaros ...

hace muchos años hacía los inicios de los tiempos, el oráculo que conocéis ahora como el de la estrella del medio era el oráculo de la gran estrella. Esta estrella era una de las más importantes en el firmamento e iluminaba mucho más que el sol. El oráculo estaba dirigido por seis sacerdotisas. Estas eran las encargadas de cuidar del oráculo y habían sido seleccionadas por los mismos astros para llevar el cuidado de tales poderes. Cada una de ellas representaba uno de los aros de la gran estrella...

- ¿que le pasó a la estrella? - cortó Siva

- Calla niña y escucha - dijo el enano

la gran estrella representaba los seis puntos de la amistad. Pensar que la gran estrella fué una de las madres de las estrellas que ahora viven en nuestro cielo. Sin la amistad no hay arte, ni vida, nada. El artista vive en compañia de su arte, es su amiga, su espacio seguro, su vida. Cuando fueron creados el Sol, dador de calor, y la Luna, dadora de frío, se dieron cuenta que la vida en la tierra pasaba sin más, los individuos interaccionan lo mínimo para sobrevivir, nada más. La gran estrella trajo a la tierra vínculos necesarios para la vida.

Pero cuando las grandes estrellas fueron apareciendo y haciéndose más fuerte, la gran estrella fué pereciendo. El peso de la vida hace que uno a veces, deba sacrificar las amistades para seguir viviendo. La gran estrella veía como en la tierra cada vez menos gente creía en la amistad pura y como sus poderes iban a menos. Sabéis que las estrellas se alimentan de la tierra, al no haber amistad en la tierra, la estrella no podía alimentarse. Fué durante las guerras de madera que la estrella murió del todo.

Pero antes, mandó a las seis sacerdotisas esparcir cada una de sus seis puntas por el mundo para que así perdurára un poco del poder de la estrella.

La leyenda cuenta que las seis puntas deben unirse algún día en el mismo oráculo

FANCY UH; una historia intrepidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora