Capítulo 1: Una cruda mañana

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Era una mañana como cualquier otra, me levante y fui derecho al baño, lo primero que note es que estaba muy pálido y necesitaba una afeitada, me afeite y me lave los diente después proseguir a tomar una larga ducha fría ya que cierta parte de mí ya se había despertado. Me cambie de ropa y me puse mi uniforme diario con mi viejo equipo confiable, después baje a desayunar lo de siempre pan duro y leche.

EREN: Lo que daría por un desayuno casero recién hecho.

Termine de desayunar, puse los trastes en el fregadero atiborrado de más trastes sucios

EREN: mañana los lavo

Estaba muy cansado por las pruebas y los experimentos que ese científico loco de ZOE me así hacer casi todos los días después que aprendí a controlar mis habilidades especiales como titán, cada vez que me transformaba en titán me agotaba más, pero estábamos seguros de que en más practicaba sería capaz de poder desarrollar nuevas habilidades, pero era tan cansado que parecía había corrido todo el día, cuando llegaba a casa no podía casi moverme, tenía casi todo el cuerpo adolorido y no tenía ganas de hacer nada pero el día de hoy sentía el cuerpo algo caliente y tenía el rostro algo pálido parecía un fantasma, pero eso no me iba a detener en mi objetico que era superar a MIKASA.

Salí de mi departamento a prisa porque se me hacía tarde para la reunión matutina de siempre. En el camino me topé con ARMI.

ARMI: EREN-grito el rubio-¿adónde vas?.

EREN: ¿cómo que adónde voy? Pues a la reunión matutina.

ARMI: la reunión ya se acabó.

EREN: ¿cómo que ya se acabó?.

ARMI: si, esta vez fue algo corto, LEVI te va a matar por faltar a la reunión de hoy.

EREN: maldición - dije enojado pero con un tono algo apagado-vamos a patrullar las murallas.

ARMI: lo siento tengo que ir a la bodega por el inventario mensual.

EREN: bueno nos vemos luego.

Me dispuse a ir a la muralla. Llegue a la muralla algo fatigado y con dolor de cabeza, como si hubiera ido de parranda toda la semana, camine a lo largo de ella durante una media hora hasta toparme con MIKASA

EREN: MIKA-de repente me sentí apagado y pesado, me desmayé lo único que recuerdo es MIKASA corriendo hacia mí.

Narra MIKASA.

Estaba en colina dejo de un árbol junto a EREN, este estaba durmiendo con su cara de despreocupación, se veía tan lindo, una mosca se había parado encima de su frente, me acerque para quitársela, me resbale cayendo encima de él, este no se despertó, me que observándolo por un buen rato hasta que este se despertó, de inmediato me intente retirar pero este me abrazo, una mano detrás de mi espalda y la otra en la parte más baja de ella casi tocando mi retaguardia por así decirlo, este me empezó a acercarme a él al punto de que los dos escuchábamos nuestras respiraciones, sentía como mi cara se tornaba roja de la impresión, pense ¿cuando EREN se volvió así de agresivo?, mil y un pensamiento pasaban por mi cabeza no lo podía creer, nuestros labios casi se rosaban, estábamos a punto de besarnos, en ese momento escuche el cantar del fastidioso gallo de mi vecino, abrí los ojos de golpe para darme cuenta que solo era un sueño. Me levante algo descompuesta, todavía no podía recuperarme de esa sensación que me hiso tener ese sueño, el solo hecho de que estuve a punto de besarme con aquella persona que era muy importante en mi vida, mi corazón todavía no se desaceleraba de la emoción. Fui directo al baño, me mire al espejo y estaba toda sonrojaba, decidí tomar un baño de agua fría para regular mi pues... dejémosle en un alboroto de hormonas.

Termine de bañarme y me dirigí a mi closet y me puse mi uniforme del diario sin olvidar mi bufanda favorita que esa persona especial me había regalado cuan nos conocimos. Baje al cocina para desayunar, comí algo de pan tostado con huevo y algo de café negro, termine de desayunar y recogí todos los trastes y me dispuse a irme a la junta matutina. Llegue 15 minutos antes de la hora, después de que el fastidioso de LEVI terminara con su parloteo me dirigí a mi posición designada por el enano. Camine alrededor de 20 minutos sobre la muralla hasta que me topé con EREN que se veía algo pálido, este intento saludarme pero cayó al piso, por poco se cae de la muralla de 50 metros y rebotaba contra el suelo, yo corrí así el a toda marcha, lo recosté sobre mis piernas y le toque la frente, EREN estaba ardiendo en fiebre.

¿UN AMOR CORRESPONDIDO?  EREN X MIKASADonde viven las historias. Descúbrelo ahora