5.- Sapos

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El joven despertó echo añicos, intentó cubrir del sol su rostro con las sábanas pero fue inútil, descubrió que unas copas de vino podían moler su cuerpo de la misma forma que un día de post- batalla.

-maldición- bufó el príncipe, estaba acostumbrado a recibir golpes en el campo de guerra, ese dolor le agarró por sorpresa, sin incluir el dolor permanente de cabeza que le causaba mantener los ojos abiertos, podía sentir su olor a uva fermentada en toda su cara y cuello y ácido en su boca.

Realmente quería darse un baño, pero si abría los ojos una vez más su cabeza explotaría, bueno, no literalmente, pero no había hombre más exagerado que Harry, en este punto, cualquier cosa le haría explotar la cabeza.

Decidió entonces intentar abrir sus ojos con cuidado, un milímetro por hora, si, tal vez ese dolor si podría manejarlo. Frotó sus ojos con el costado de su manos y por un destello de segundo recordó un pequeño fragmento de la bochornosa escena que protagonizó frente al hijo del cenador <<no te voy a besar>> e inmediatamente sus manos cubrieron su rostro con tanta fuerza que pareció un cachetada.
-Maldita sea.


-Mas vale que estés listo maldito bastardo..
Es lo primero que escuchó Louis al despertar, dormir pocas horas nunca le había asentado bien, pero definitivamente era mejor bebedor que su compañero de anoche.

-Za- zayn?- preguntó entreabriendo los ojos con una voz aún adormitada.

-Si imbecil ¿quién más podría ser?- dijo jalando las sábanas que arropaban al castaño quien estrujó su cuerpo intentando evitar ser despojado de sus mantas, sin éxito- Ahora escúchame- Zayn se sentó en el borde de la cama- Mañana recién empiezan mis actividades, me dieron el día libre.

-uhHmm..- el castaño frotaba sus ojos intentando procesar las palabras de su amigo- llega al punto de una vez-
Zayn quedó paralizado con la boca abierta indignado.

-Vamos a ir de excursión, me importa muy poco lo que tengas que hacer, hoy no existes, simplemente no existes.

El castaño rodó los ojos y se paró de golpe mirando a su amigo sentado todavía a los pies de la cama.

-Hoy es sàbbat^ Zayn, ¿entiendes que es un día de descanso?

El pelinegro alzó sus hombros despreocupado- claro que lo sé pero hoy no descansas ni un dátil, te vienes conmigo a conocer la gran y natural Atenas..- se paró y tomó su pequeño bolso con algunas frutas- ¿o crees que en serio esta ciudad siempre fue solo piedras y mercados?

Louis hizo estiramientos matutinos mientras que escuchaba lo que su compañero le decía, se quitó sus prendas del día anterior y se puso unas más ligeras y no tan formales, conocía a Zayn, caminaría mucho, probablemente regresarían al amanecer, el pelinegro era aventurero y audaz pero con muy poca memoria fotográfica, si no fuera por la buena capacidad sensorial espacio/tiempo que manejaba Louis, hubieran muerto perdidos hace muchos años.

-Bien, estoy listo- cogió su cantimplora que estaba debajo de algunos pergaminos y escritos que removió sin cuidado alguno y se aseguró de que esté llena- podemos irnos
Salieron de su habitación en silencio, a penas eran las 6 de la mañana y por la gran fiesta de anoche, los únicos despiertos eran los sirvientes del palacio, quienes hacían sus deberes con el mayor silencio posible para no despertarlos.

Atravesaron todo el pasadizo y llegaron al patio familiar, las puertas de las habitaciones reales estaban cerradas y había silencio, solo se oían algunos pasos de los sirvientes entrando a las habitaciones con las frutas y meriendas del día. Notó a la pequeña Joná con una fuente de plata llena de frutas, vasijas y una jarra, abrir aquella puerta que la noche anterior él había cerrado, no pudo evitar quedarse mirando y detuvo su paso.

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⏰ Última actualización: May 27, 2021 ⏰

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