HIS LOST INNOCENCE

Capítulo 1

Cuando el recién formado wizengamot, los aurores, el ministro y todos los que trabajaban en la ley en el ministerio de magia rechazaron la declaración de Harry Potter con respecto a Severus Snape, Harry vio como le ponían grilletes en las muñecas a Severus antes de arrastrarlo fuera de la sala donde sería llevado a Azkaban durante los próximos cinco años. El razonamiento para su castigo de cinco años era que había sido un mortífago, tenía la marca oscura que significaba tiempo en Azkaban, no importaba que Severus Snape pudiera haber ayudado a Harry Potter y Albus Dumbledore. Cualquiera que tuviera una marca oscura era enviado a Azkaban. Lo mismo ocurrió con Draco Malfoy, aunque Harry explicó que la ayuda que Draco le había prestado había permitido a Harry y a Ron salvar al señor Ollivander, a Dean Thomas, a Luna Lovegood y a un duende antes de rescatar a Hermione de Bellatrix Lestrange, de nuevo no hubo diferencia y fue condenado a cinco años en Azkaban también, ya llevaba dos meses allí.

Harry salió furioso de la sala, se abrió paso entre los funcionarios del ministerio que intentaban llamar la atención de Harry, también se abrió paso entre los periodistas pero dijo unas palabras con la esperanza de que informaran de lo que había dicho.

-Que se joda el ministerio y que se joda el mundo mágico-.

-Harry, no puedes estar hablando en serio, ahora cálmate y deja de actuar como un idiota-, dijo Ron apresurándose tras Harry.

Harry se giró, -Y jódete tú también Weasley, espero que acabes en el infierno, tu sitio está ahí. Si vuelves a intentar hablarme, yo mismo me encargaré de ti- gruñó Harry, y luego se dio la vuelta y se alejó a toda prisa. Siguió avanzando mientras pasaba por delante de todos, incluso de los amigos que se negaban a apoyar a Harry en lo referente a Severus Snape.

Harry regresó a Grimmauld Place, empacó su ropa y salió de la vieja casa, alejándose de todo lo que se relacionara con él de alguna manera. Encontró la cabaña aislada en lo profundo del bosque que había pertenecido a sus padres, ellos sólo compraron esta cabaña para ayudar a Remus especialmente en las tres noches de su cambio. Como James Potter venía de dinero y Remus nunca pudo conseguir trabajo, los Potter querían ayudar a su amigo, así que la cabaña apenas estaba amueblada para esas noches en las que salía el lobo, pero tenía los muebles suficientes para que Remus los usara durante el resto del tiempo que pasaba allí. Harry se había enterado de la existencia de la propiedad cuando le entregaron otra bóveda que le dejaron sus padres, pero como los duendes no pudieron encontrar a Harry en su decimoséptimo cumpleaños, no pudieron notificarle el resto de su herencia.

Harry miró a su alrededor, no era grande pero tampoco era demasiado pequeña. Encontró el dormitorio y deshizo el equipaje antes de echar un buen vistazo. Salió de la pequeña cabaña y encontró el pueblo cercano, al ser un pueblo mágico pudo comprar toda su comida, la encogió y luego se metió todo en el bolsillo. Cuando salió de la tienda, una mujer de unos sesenta años se acercó a él.

-Oh, señor Potter, espero que pueda hacer algo con los mortífagos que quedan, parece que están fuera de control-.

-Entonces le sugiero que mire hacia su ministro, voy a dejar el mundo mágico-.

-Oh, pero por qué, has hecho mucho bien por nuestro mundo-.

-Lo hice, pero enviaron a mi amante lejos a pesar de que era inocente. ¿Esperas que ayude después de que me hayan traicionado así? Tal vez puedas transmitir un mensaje de Harry Potter, más vale que el ministerio espere que otro mago oscuro no haga lo que hizo Voldemort porque yo no estaré para ayudar la próxima vez, me voy-, Harry se dio la vuelta dispuesto a alejarse pero miró hacia atrás, -espero que sobrevivas a lo que te espera-, con eso Harry se dio la vuelta en el acto, desapareciendo dejando a la mujer atónita ante la fría mirada que tenía el joven Potter justo antes de irse.