*La vida ante mis ojos*

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"Te vez espectacularmente preciosa cuando duermes, recuerda que eres solo mia mi princesa de invierno".

Literalmente quedó en shock al leer esto, estoy muy segura que cerré muy bien mi ventana antes de dormir. me tambaleo hacia atrás y quedo sentada en una esquina de mi cama, respiro hondo y me levanto, despues de esto estoy totalmente de acuerdo con mi madre, ¡debemos marcharnos!

Empiezo a empacar mis cosas esperando que llegue Darya, dijo que vendría, y se me hace extraño que aún no haya legado. Pongo mi ropa en una maleta y los libros y accesorios en cajas, sin embargo, hay algo que no para de darme vueltas en la cabeza... ¿que rayos significa eso de "princesa de invierno"? Cruzo la puerta de mi cuarto y bajo las escaleras, veo a mi madre en la cocina hablando por teléfono, en cuanto me ve hace una seña de que la espere asi que me siento  en el sofa con esa extraña nota en mi mano. Mi madre se dirige hacia mi despues de acabar con la llamada con una expresión de tristeza.

-¿Que pasa mama?- digo levantandome del sofa.

- Y...yo- empieza a decir y se que por su tono de voz algo malo pasa

-¿Que pasa?- digo levantando un poco la voz y tomando a mama por los hombros.

- Lo siento pero no puedes viajar conmigo- dice ella retomando su compostura.

-¿Como que no puedo viajar contigo?- le digo molesta- ¡Soy tu hija!-

-Si, si ya lo se pero surgio un problema y no puedo llevarte conmigo- dice y se va

- Pero no puedes dejarme aquí!-digo en tono de protesta.

-¡Si puedo hacerlo!- me grita, cosa que me sorprende ya que nunca lo había hecho- ¡soy tu madre Charlotte y debes hacer lo que yo diga!- 

Me da la espalda dirigiéndose a la puerta y antes de salir se da vuelta y me mira

-La decisión ya está tomada, no discutas mas- anuncia y se va.

Esto no puede ser cierto, no puede estar pasandome esto.

Subo a mi cuarto corriendo tomo una almohada la pego a mi rostro y trato de sacar toda mi rabia gritando, durante años esto lograba calmarme, pero últimamente, parece que la magia se desvaneció, concluido esto me pongo un suéter unos pantalones y mis audífonos para salir a tomar el aire.

Cuando salgo de mi casa una suave brisa roza mi cara haciendo que mi cabello se levante y llevándose a su paso las actitudes negativas. 

No debe ser tan malo quedarme a vivir sola aquí.

Tengo a mi mejor amiga y con eso basta.

Me pongo los audifonos y doy vuelta hacia la dirección contraria, pero antes de poder dar un solo paso ya me encuentro tirada en el suelo con la nariz y el trasero adolorido.

-¡Me cago en la P**!- digo levantándome y sobandome.

¿¡Que no te fijas por donde andas!?- le grito al chico parado frente a mí alzando la cabeza para verlo, pero...no puede ser cierto,sus ojos son...son los mismos de aquel chico la otra noche.

Justo en ese preciso momento fue como si todo se hubiera detenido, como si toda mi vida pasará ante  mis ojos, recuerdos borrosos, páginas negras de mi vida y... por un momento mi mente se convirtió en una completa tormenta que se extinguirá para convertirse en el mismísimo infierno 


Ojos del diabloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora