Miradas llenas de sentimientos

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Royal Woods al día siguiente.

Un hermoso domingo comenzaba y los únicos planes para un pequeño albino eran los que tenía con su hermana menor Lucy, sin embargo, de improvisto una de sus hermanas entra sin más a la habitación.

—¡Lincoln!— "rayos" fue el pensamiento que inmediatamente se plantó en su cabeza al ser despertado repentinamente ya que aún quería dormir un poco más —mañana tengo un partido importante de fútbol soccer ¿Puedes ayudarme a practicar?— le decía la deportista de la familia mientras se acercaba a la cama y lo jalaba del brazo para que se levantará.

—espera... ¿Mañana? ¿No tenías un partido de baloncesto mañana?— pregunto el niño albino confundido.

—no tonto, ese es el martes, mañana son los de fútbol soccer y béisbol— le dijo la chica mientras sin ningún tipo de reparo abría los cajones del albino y tomaba de sus colgadores ropa para el chico —¡Rápido debes vestirte nos aguarda un intenso día de entrenamiento!— le dijo mientras tiraba su ropa a la cama y parecía disponerse a quitarle la pijama ella misma hasta que él la detuvo.

—wow wow wow... Wow... Está bien Lynn, entiendo. Me cambiaré...— se levanta de la cama y empuja como puede a su hermana mayor fuera de su cuarto —mientras tú esperas aquí, gracias— le cierra la puerta dando un pesado suspiro apoyándose en la misma.

Lincoln mirando a los lectores —no me mal entiendan de verdad quiero ayudarla, pero son... ¡¿Las 7:00 de la mañana?! ¡¿Quién rayos si no es por trabajo se levanta tan temprano un fin de semana?!... Ah~ al menos mis hermanas se levantarán tarde, quizás si logro que ella se canse... ¿Qué estoy pensando? Es claro que me falta sueño— se frota los ojos con las manos y luego se da unas palmadas en las mejillas —ella no se cansará, hasta la tarde y hoy se supone saldría con Lucy y mamá... Aaaaah~ esto será difícil— se comienza cambiar de ropa ya que escucha los golpeteos de su hermana a la puerta para saber si ya está listo —¡Ya voy!— le grita con toda la amabilidad que puede a pesar de que ella continúa golpeando —ah~ es así desde hace mucho, me pregunto si abra alguna forma en que se relaje y... Jmmm...— coloca su mano en el mentón mientras piensa —¿Saben? Tal vez tenga una idea, pero igualmente la ayudaré a entrenar al menos durante la mañana y usaré los descansos que me da para averiguar algo después de todo sigue siendo mí hermana por lo que ayudarla y estar con ella me hace muy feliz— sonríe habiéndose terminado de cambiar para abrir la puerta.

—¡Finalmente!— le tomá de la mano y lo lleva casi arrastrando hacia el patio de atrás —¡Vamos a comenzar!— le dijo una vez llegaron mientras que el pobre chico había quedado aturdido por la velocidad de su hermana aún cuando lo llevaba a él.

Así transcurrió toda la mañana y cada una hora el pequeño albino tomaba un descanso que decía era para ir al baño, pero en verdad era para ir a su habitación para buscar información en su celular, para que no sospechara tuvo que dividir su plan en 3 tiempos. El primero fue para encontrar la información necesaria, el segundo para leer la información y el tercero a las 10 a.m. fue para memorizar la más a detalle y así finalmente estar listo por lo que una vez hecho bajo confiado de que su plan funcionaría o eso esperaba.

—¡Al fin llegas! Vamos ahora practiquemos un poco de lucha— le decía con emoción y muchos ánimos la pequeña deportista.

"¡¿Pero de dónde saca tanta energía?! Es cómo si estuviera poseída por un demonio de los deportes o algo así" pensó el albino que ya tras 4 horas de entrenamiento a penas podía moverse "sí no ejecuto el plan ahora no podré descansar al menos una hora para estar bien cuando salga con Lucy" pensó una vez más por lo que con determinación y confianza se acercó a su hermana "por favor, enserio por favor funciona" fue lo último que pensó antes de estar en frente de ella.

TLH: Dangonronpa Planes de desesperaciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora