TITÁN| Levi Ackerman|

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Al día siguiente, Deldri se despertó y vio que Levi no estaba ahí así que supuso que se había adelantado a desayunar y preparar todo para su salida en unas horas.

Ella también se levantó y fue al baño a darse una ducha e ir al comedor con sus demás compañeros.

—ayer te vi entrando al cuarto del capitán—Petra llego a lado de la chica mirándola pícaramente—¿Cuánto más crees que tarde en que alguien más note lo de ustedes dos?

—ya sabes Petra, Levi es muy cerrado en cuanto a los temas personales, no quiero presionarlo para hacer algo que lo hará sentir incómodo—la rubia tomó un poco de jugo

—solo guardo el secreto porque soy tu mejor amiga, pero espero que cuando se casen, sea la dama de honor—Petra pasó un brazo por el hombro de Deldri

—por supuesto que si, nuestros hijos se criaran juntos y todo será muy bonito—dijo Deldri

Después de desayunar, todos fueron a alistarse para poder irse, pero antes, Deldri fue a su cuarto y se miró al espejo, como sucedía cada que ocurría una expedición.

—solo te transformarás si es necesario—repetía a su reflejo—solo te transformarás para proteger a tus compañeros

Cada que había expedición, Deldri rogaba que no hubiera una situación de extremo peligro para no tener que usar el poder que tenía desde hace cinco años, era un poder que sabía si alguien más se enteraba podría tener problemas con todos y más con Levi, por eso prefería guardarlo para ella.

La rubia se dirigió a los establos para tomar a su caballo e ir a la formación junto a los demás, ya que debían de pasar por Trost antes de salir de los muros en dirección al muro Maria.

Todos se reunían para vitorear a los héroes que arriesgaba sus vidas por el avance de la humanidad, Deldri les sonreía a algunos de ellos, ya que sentía un honor el tener el apoyo y confianza de tantas personas en sus objetivos, pero cuando iban casi a llegar a la entrada, Deldri sintió un olor muy extraño.

Era algo que nunca creyó experimentar a pesar de que su madre se lo advirtió, que conforme la humanidad fuera acercándose a un punto en el que podría existir esperanza, llegaría consigo otros problemas.

Deldri vio a su derecha a un grupo de cadetes que estaban a punto de graduarse, entre ellos estaba un chico castaño, no entendía el porqué ese olor empezaba a presentarse ahora, pero decidió pensar que era algo sin importancia.

Al llegar a la puerta, Levi se puso a lado de Deldri.

—por favor, ten mucho cuidado—dijo el chico

—tú también cuídate mucho—contesto ella

La puerta se abrió dando inicio a la expedición número cincuenta y siete fuera de los muros, el equipo de Deldri se quedaría en la retaguardia para vigilar y avisar la presencia de titanes que pudiera haber en el camino.