Por la pandemia las clases debían ser online, las personas no salían de su casa por miedo al contagio porque seamos realistas... A ninguno le gustaría enfermarse y caer al hospital.
Tadashi y Kei comenzaron a tener video llamadas muy seguido, siempre en la noche. El día de hoy fue un día de solo limpieza, Tadashi había terminado de limpiar bastante tarde pero al menos había quedado todo limpio y ordenado.
Kei de todas maneras lo llamó, era aburrido pasar todo el día en casa, encerrado y sin hacer nada, después de todo su hermano mayor y su madre hacían todo.
— ¡Hola Tsukki! — contestó emocionado Tadashi, pero se notaba el cansancio en su cara.
— Yamaguchi, te ves cansado.
— Lo estoy pero quería hablar contigo primero, después me iré a bañar y luego a dormir.
Tsukishima lo mira sonriente.
— No me molesta acompañarte hasta la ducha, y mejor aún si dejas la cámara encendida.
Yamaguchi lo miró por unos segundos, comenzó a sentir calor y a su corazón latir frenéticamente.
— Tsukki, pervertido. — grita para colgar la llamada.
Kei no puede no reír, le encantaba molestar a Tadashi y gracias al pecoso ahora tenía un leve ataque de risa. Que al bajar para cenar, tanto su madre como su hermano lo miraban como si tuviera un tercer brazo.
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Quiero tener mis vacaciones. Tampoco quiero estudiar y eso que recién estoy en mi primer año jajajajja
