My oppa | kv

14.

Jungkook tocó el timbre varias veces esperando impaciente a que abrieran aquella puerta. Ya tenía cinco minutos afuera, estaba perdiendo la nula paciencia que le quedaba esa noche. 

Prendió un cigarrillo y se lo llevó a los labios, botando el humo por la nariz, sintiéndose un poco más relajado, pero recordando cómo tenía ya unos días sin consumir, y sabía porque no lo había hecho, por Taehyung, él lograba calmarlo tanto, y lo hacía sentir tan bien, que no era necesario recurrir a los vicios. 

La puerta se abrió, él tiró el cigarrillo y lo apagó con una de sus botas Prada antes de sentir como Eunha se abalanzaba contra él, dándole un abrazo. 

Jungkook la empujó lejos, frunció el ceño, volviendo la ira nuevamente con tan solo ver aquel rostro. 

— Kookie. ¿qué ocurre precioso, porque me empujas? 

— Dime que mierda le hiciste a Taehyung… 

— ¿De qué estás hablando?

— Eunha por favor, por una vez en tu puta vida, deja de hacerte la idiota y contesta lo que te pregunté.

— Yo ni siquiera he visto a ese estúpido…

— ¡Deja de mentir! Te vieron en el hotel. Así que te lo preguntaré nuevamente. ¡¿Qué le hiciste a Taehyung?!

Eunha comenzó a ver cómo el rostro de Jungkook lucía enfado, a ella le causaba miedo aquello, no porque el azabache fuese agresivo, si no porque él no medía sus palabras, y terminaba lastimando a las personas. En este caso a ella.

— Okay, lo ví, solo fui a dejarle claras algunas cosas y me fui de ahí.

— ¿Qué cosas? 

— Nada importante… — comenzó a ponerse nerviosa.

Jungkook soltó una risa nasal.

— Si claro, nada importante, bien… Entonces, cómo es que con algo que no es importante. ¡¡Terminó con el rostro herido y después tomó un  vuelo de regreso a Corea!!

Listo, Jungkook había perdido toda la paciencia. 

— Por favor no grites, estamos en la calle…

— ¡Me importa una mierda que estemos en la puta calle Eunha! No voy a dejar de levantar la maldita voz hasta que me digas porqué lastimaste a mi chico…

— ¿Tu chico? ¿Es enserio? 

— Si, él es mi chico, mi novio, mi vida entera, ¿quieres que siga? 

— ¡No, no quiero escucharte más, porque estás mintiéndome! Tú no quieres estar con él de verdad, tú solo te encaprichaste, y puedo entender un poco, ya que es guapo, y tiene buen cuerpo, pero nada comparado al mío, yo tengo atributos que a él le faltan. Además, a ti te gustan las chicas Jungkook…

— ¿Puedes dejar de decir tantas estupideces por un segundo? Para empezar, las chicas y los chicos me dejaron de gustar apenas Taehyung llegó a mi vida, no me interesa nadie que no sea él ¿Entiendes? Y respecto encapricharse, eso te queda específicamente a ti, puesto que lo estás de mí desde que tengo uso de razón…

— ¡Mientes, mientes! Tú no sientes nada por él, solo lo quieres por qué es algo nuevo para ti, y porque tal vez coge bien, y se entiende pues es un prostituto, que se acuesta con medio mundo...

Jungkook se acercó amenazante a Eunha, la cual se alejó, recargando su espalda contra la puerta.

— Vuelve hablar así de él Eunha, atrévete hacerlo nuevamente y me va importar poco que seas mujer…