Tal y como Ray le había dicho, se fue de inmediato al baño, dejándole su bento. Y sin decir más, se fue. Con una expresión exhausta en su rostro.
Esperaba que realmente no tuviese nada grave.
Suspiró, dirigiéndose a dónde Emma estaba para sentarse a su lado. Pues él no tenía ningún problema con ella, y sería grosero ignorarla e irse.
— Lo siento por eso, Emma-san... A Ray-san le surgió un imprevisto — se disculpó en nombre de su amigo, con una sonrisa apenada —. ¡Pero no se preocupe! Él va a volver, ¡Aquí está la prueba! — dijo, mostrándole el bento del pelinegro, haciéndola reír levemente. Haciéndolo sentir aliviado.
— Estoy bien, Hayato. En verdad — le aseguró con una sonrisa —. No necesitas disculparte en nombre de Ray... Después de todo, yo tampoco esperaba encontrarme con ustedes aquí.
Hayato no pudo evitar sentir curiosidad —. Emma-san, ¿Puedo preguntar algo?
— Ya hiciste una pregunta, Hayato — se rió ligeramente —. Pero puedes hacer otra, adelante.
Hayato sonrió, Emma-san era agradable. No entendía en verdad por qué Ray-san se empeñaba en huir o evitarla.
— ¿Por qué comer aquí en la azotea, sola?
—... A veces estar rodeada todo el tiempo de personas es un poco agotador — admitió, sonriendo tímidamente, mirando un segundo su bento —. No me desagrada estar con los demás, pero... A veces quisiera estar un momento a solas y relajarme un poco. Y como aquí casi nadie frecuenta la azotea, quise venir.
— Está bien, Emma-san. No necesita explicarlo, está en todo su derecho de elegir si quiere estar sola o con los demás — Hayato abrió su pan de melón, dándole un mordisco generoso —. Lo mismo pasa con Ray-san. Puede ser muy serio y reservado, pero cuando quiere o es necesario, puede hablar con los demás — tragó su bocado, mirando al cielo con una pequeña sonrisa —. Después de todo, él no me aparta y deja que le hable con confianza.
— ¡Oh!, ¿Verdad que siempre puedes hablar con él de cualquier cosa sin sentirte incómodo?
— ¡Sí! Es bastante cómodo estar a su lado, incluso si no hay tema de conversación. ¡Y también es amable!
— ¡Lo sé! Podrá tener cara de amargado, pero también es lindo.
Hayato asintió —. Y también es muy habilidoso... De hecho — se acercó a ella, como si estuviera a punto de contarle un secreto —, los Bentos de Ray-san son todos caseros y hechos por él mismo.
A Emma se le iluminaron los ojos de la emoción —. ¡De verdad? ¿Los has probado?
— Son muy buenos, créeme — le aseguró Hayato, con su dedo pulgar levantado, sonriente.
...
¿Por qué este mundo se empeña en hacer que me encuentre con Emma? ¿Dios me odia tanto para hacerme esto?
Era lo que se cuestionaba Ray, con aflicción, sentado en la tapa del retrete —no sin antes poner papel higiénico encima—. Encerrado en el cubículo, cubriéndose la cara con las manos.
—... Comienzo a creer que mi existencia es un chiste sin gracia — murmuró para sí, quitando lentamente las manos de su rostro, con una mueca de amargura —. Es decir, reencarné en un estúpido Otoge escolar repleto de clichés escolares, y por si fuera poco, soy un villano en una de las rutas que la protagonista tiene para escoger pero no — suspiró —... La protagonista eligió a este villano.
Pudo haber gritado: ¿Qué más quieres de mí, Dios!
Pero se lo ahorró, ya de por sí se veía raro murmurando cosas —estupideces para quienes estuvieran por ahí—. Un suicidio social no estaba contemplado en su vida pacífica.
Y cuando se disponía a levantarse para volver a la azotea y desayunar (independientemente de si Emma estuviera ahí o no), el que tocaran la puerta de su cubículo lo desconcertó.
¿Quién era? Dudaba que fuese Hayato.
— Si ya terminaste de murmurar quién-sabe-qué Ray, ¿Podrías ayudarme?
¿...Norman?
— ¿Qué? ¿Ayudarte con qué?
— Ray...
Suspiró —. Está bien, está bien. Ya voy.
Abrió la puerta del cubículo, y sin siquiera esperarlo, Norman estaba ahí frente a él.
Con una carta en mano, y un rubor en sus mejillas.
-Traumada Taisho
Sólo diré: PFFFFF JAJAJA.
Y pues, hablar con Diphtheriae ayudó. Te lo dedico a ti ùwú ♥
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La protagonista femenina se enamoró del villano [Ray/Emma] {HIATUS}
Fanfic[Short-fic/AU] La protagonista, Emma, sufrió de insta-love (amor a primera vista). La protagonista, se enamoró del villano. Y el villano era él, Ray.