DARK MAFIA

Capítulo 40

Kayden

-Ares es tuyo...-

Esas dos palabras me dejan tieso como una vela.

Se baja de mi regazo y se sienta bien en el banco.

Durante unos segundos lo proceso.

Artemisa me mira analizándome.

Cuando me doy cuenta de lo que ha dicho...

La agarro de las caderas, ella pega un chillido del susto, yo la levanto y la subo a mi regazo y la doy un beso largo en la boca para después darle besos por toda la cara.

Ella ríe, yo la doy unos cuantos besos más y luego paro.

-¿Un mini yo?- la pregunto. Ella sonríe y asiente.

-Si, y literal sois iguales, tiene casi 4 años- dice sonriendo -tenéis el mismo carácter, el mismo pelo y los mismos ojos-

Yo río -¿Lo podré conocer?- le digo sonriendo y haciendo un puchero. Ella sonríe y me da un beso en la boca.

-Pues claro, además, él sabe de ti- me dice, yo abro los ojos de sorpresa.

-¿Enserio sabe quién soy yo?- le digo con los ojos cristalizados.

-Si, sabe quien eres, tiene una foto tuya que lleva siempre con él, yo también le cuento historias sobre nosotros cuando íbamos al instituto, y también le cuento sobre ti y lo guapo que eres- me dice sonriendo y acariciándome la mejilla con su mano.

-No puedo estar más feliz ahora mismo- le digo dándole besos por toda la cara.

-Jajajaja, par-a qu-e me hago pis de l-a ri-sa- dice como puede subida en mi regazo. Yo sonrío y paro de darle besos -además nuestro hijo es muy, pero que muy listo, sabe en lo que trabajo con las chicas y nadie le dijo nada- dice sonriendo.

Yo abro los ojos y la boca de sorpresa.

-¿En serio, y como lo supo?- la pregunto.

-El me contó que lo sabía por los trozos de conversaciones telefónicas que escuchaba de nosotras y porque un día le vio el arma a una de las chicas, nosotras 4 siempre que salimos a la calle llevamos una pistola cada una en el bolso, por protección, otras veces llevamos nuestros guardaespaldas además de nuestro perro- me dice -pero el solo lo dedujo todo- dice riéndose -Además... jajaja...- para porque le entra la risa.

-Además, llama a las armas juguetitos y a la droga chuches o polvos malos que hacen que te duela la tripa- dice riéndose. Yo me empiezo a reír con ella.

-¿En serio?- le digo riendo, ella asiente.

-Además, nos ha dicho que cuando sea mayor va a trabajar con nosotras para que nuestra mafia, ahora vuestra también, sea la mejor- me dice sonriendo.

-Nuestra mafia... Suena bien eso- le digo sonriendo. Ella asiente.

-Ahora si quieres te doy mi número de teléfono y así te puedo llamar para que lo puedas ver, mañana estaremos un poco ocupadas con unas cosas, pero si quieres te llamo y vas a casa para que se conozcan, seguro que le caes super bien- me dice sonriendo. Yo la devuelvo la sonrisa y la beso en la boca.

-Me parece bien, pero ten en cuenta de que le daremos mas hermanitos- le digo sonriendo.

-Me parece bien, yo quería tener mas hijos y Ares quiere más hermanos...- me dice encogiéndose de hombros y sonriendo.

-Perfecto- le digo, nos miramos fijamente durante unos segundos, nos vamos a besar...

-Me encantas- la digo y cuando estamos a punto de besarnos nos interrumpen.