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Pov Hory
"Entonces es un hecho" dijo la fémina para levantarse del sillón de cuerpo en donde ya hacia el pequeño megumi despierto mirando a los jóvenes platicando.
"Entonces empezarías mañana" el azabache la miraba un poco serio ya que no quería perder su compostura ante ella.
"Bien entonces me voy, mañana volveré a la misma hora" dijo para darle una cálida sonrisa y girarse a la puerta, justo cuando ya se iba el azabache le dijo.
"Hory creo que no me entendiste" dijo aquel joven acercándose a ella.
"Entender de que Fushiguro, tengo cosas que hacer en mi casa mañana volveré no se a lo que te refieres"
"Ya no vivirás mas en tu casa, ahora en adelante vivirás aquí" dijo tensando la quijada para poner sus brazos en los costados de los bolsillos de su pantalón.
"¿Que?" dijo boquiabierta con un poco de molestia en su cara.
"Como oíste hory, necesito que estés al pendiente de megumi las 24 horas del día y los 365 días del año"
"Oye espera, ¿estas demente? tengo una hipoteca que pagar sobre mi casa para que no la viva ahí, ¿y quieres que viva contigo? estas consciente de que no tengo mis cosas para quedarme en tu casa?"
"Eso ya lo arregle con tu amiga, ¿Clarisa no? se llamaba así, tu hipoteca ya esta pagada y esa casa ya es tuya y sobre tus cosas podemos traerlas pero, necesito que te quedes si o si".
Estaba jugando sucio conmigo Clarisa. ahhggg. Cuando la vea la voy a colgar de su cabello teñido. Pero en fin no puedo hacer nada, el ya pago la hipoteca de mi casa así que no me quedaba de otra mas que aceptar su oferta en vivir con el y ser la niñera de por vida de megumi. Suspire muy flojamente y lo mire para poder tirarle una cara de "Tu ganas".
"Esta bien, viviré contigo y solo lo hago por que tu pequeño necesita que lo cuiden"
"Perfecto, entonces te mostrare donde dormirás" dijo el para ir por el pequeño y cargarlo para después subir las escaleras de esa enorme casa y yo seguirle el paso.
Caminábamos por el pasillo buscando lo que seria mi nueva habitación en lo que me resta de vida ya que como lo oí quiere que este al pendiente de su hijo la 24 horas del día. Me mostraba cada habitación para que yo no me perdiera en esa enorme casa.
Después me mostro la habitación del pequeño donde lo bajo y este empezó a buscar sus juguetes para tomarlos y así quedarse entretenido con estos. Junto a la habitación del pequeño se encontraba la habitación del azabache.
Me dijo que cualquier cosa que necesitara en la noche que lo encontrara en esta, para después ir a la habitación donde me iba a quedar. Abrió la puerta para dejarme pasar. Mire la habitación. Un color verde grisesco muy bonito, un baño al fondo y una cama King size en medio de esta.
