CAP 17: PROBLEMAS

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La bulla se escuchaba desde afuera, era una casa muy grande y en el patio nos estacionamos, de pronto Lois paso del asiento delantero al trasero y comenzó a cambiarse, obvio me voltee, ella me lo agradeció mientras se seguía vistiendo.

No me había percatado que salió del auto, de pronto abrió la puerta de mi lado, su ropa me sorprendió muchísimo. Llevaba puesto un top rojo con encajes negros, una falda negra y una botas negras con pasadores rojos que le llegaban casi hasta sus rodillas, como siempre todo esto acompañado de un moño alto y con su labial rojo.

- Bien, entremos (algo agitada por tener que alistarse de prisa).

- Ahh

- Vamos, baja.

Baje del auto y al entrar a la casa casi todos se quedaron mirando a Lois, la saludaban y su amiga se acercó para decirle que se veía hermosa, ella le agradeció humildemente y le preguntó algo al oído. Después de eso su amiga nos guió al último piso de la casa, que por cierto era una casa de 3 pisos, y nos señaló una habitación.

- Aquí te puedes quedar, nadie los molestara.

- Okey, muchas gracias.

- Para eso están las amigas.

Lois la acompañó a la puerta y no pude oír lo que parecía pregunto pero sí la respuesta. ..la habitación que está a dos habitaciones lejos del baño, está acompañado. - Susurro. - Bien.

Intuí que tal vez quién estaba en esa habitación era su hermano, por lo que me comentó de él. Pero tampoco debo ser inoportuno.

Cerró la puerta y se dirigió a mí.- Me puedes disculpar, tengo que hacerme cargo de un asunto.- dijo Lois. - No te preocupes, no hay problema.- le respondí.- Que bueno, gracias por comprender, puedes quedarte aquí o bajar a la fiesta, cuídate.- Abre la puerta y se retira.

Deje que pasara un rato, pero era obvio tenía que bajar pues no había hecho todo un viaje de un mundo a otro por gusto, tenía que observar cómo se comportan los consumidores.

Bajé al primer piso sin problemas, hay era todo un desorden, mientras observaba me percaté de la presencia de ese bravucón llamado Hajime, como era de esperarse molestando a otro chico en la fiesta con sus amigotes al lado.

- No estarás considerando meterte en problemas, ¿no?

La amiga de Lois de hace un rato interrumpió mis pensamientos.

- ¿Meterme en problemas? Los únicos que podrían traer problemas serían ellos.

- Vamos, estamos en una fiesta, no estamos aquí para meternos en la vida de los demás sino para divertirnos, sebas que problemas me traería que comenzaran a hacer un alboroto.

¿Así es como se tratan entre ellos? Solo viven ignorando cosas como estás, y llaman a eso no meterse en problemas cuando podrían hacer algo, si no les pasa a ellos no importa.

- ¿Cómo podrías divertirte mientras eso ocurre en tu fiesta y en tu casa? Tú más que cualquiera podrías hacer algo y solo piensas en que mejor que nadie lo note o se preocupe por ello. (Molesto)

- Tú no tienes derecho a hablarme así, ya lo dijiste es mi fiesta y mi casa así que cuidado con lo que me dices-

- Eso sonó a una amenaza o me parece, creo que te confundes de persona a la cual deberías amenazar y dices que no quieres ocasionar problemas, quieres crear uno para defender a esa clase de persona. Significa que no te puedes dar el lujo de botar a una persona como esa, puede ser tu fiesta, pero tu poder social es menor a la que él aquí.

- (Se acerca) Pensé que podíamos ser amigos, pero veo que no, te crees superior a todos aquí ya veremos si eso te dura mucho, que te quede claro que solo dejaré que te quedes porque eres amigo de Lois.

Se alejó para irse al lado de unas amigas, decidí subir al segundo piso, ya no soportaba ese ambiente, mientras subía noté que Hajime se acercó a ella y se mostraba dominante.

Continue subiendo, al parecer en el segundo piso no pasaba mucho, subían para hacer digamos cosas más íntimas en su mayoría.

Decidí que todo esto había sido agotador, el ambiente era pesado e incómodo así que subí al tercer piso, lo extraño que empecé a notar mientras subía fue que no me había topado con Lois a donde habría ido exactamente, pero de pronto mis pensamientos se vieron nuevamente interrumpidos.

En uno de los cuartos del tercer piso salía furiosa una chica, pero antes de irse se volteó para dar una cachetada al que era el hermano de Lois, para la sorpresa de la chica y mía, Lois detuvo la cachetada sujetando el brazo. 

Nuestro Lago LoionDonde viven las historias. Descúbrelo ahora