Short-Shots para Bakugou Katsuki

Día#5: Características animales

—Midoriya se está portando raro.—dijo Shotou mientras miraban como Izuku estaba refregando su rostro sobre uno de los almohadones de los sofás de la sala común.

De pronto, un ruido proveniente del exterior de los dormitorios lo alertó y, de un segundo a otro, salió corriendo a toda velocidad hacia la fuente del mismo. Shotou, Tenya, Ochako y Tsuyu vieron a través de la ventana como Izuku saltaba hacia los balcones. Segundos después Katsuki gritó alguna clase de insulto.

No volvieron a verlo hasta el horario de clase que lo encontraron en el aula bastante cerca de Katsuki. Cuando llegaron Izuku los saludó con entusiasmo, sin embargo, no se movió de dónde estaba.

Lo vieron jugueteando con los cabellos rubios del otro durante la clase. A algunos les pareció raro que Katsuki no reaccionara negativamente, pero ninguno dijo nada al respecto. De pronto, el silencio se vio interrumpido como era habitual, pero esta vez por un sonido diferente. Ya todos estaban acostumbrados a escuchar los murmullos de su compañero, pero esta vez, desde su lugar podía escucharse un suave ronroneo.

Bajo el asiento de Izuku, algo negro y largo comenzó a moverse de un lado a otro. Llamando la atención de Shouto. 

—Cola.—dijo atrayendo la curiosidad de varios, que también lograron ver la peluda extensión moviéndose bajo la silla.

—Midoriya—le llamó desde su lugar en el fondo del aula para preguntarle por la cola. Izuku se giró rápidamente ante el llamado y grande fue la sorpresa de todos cuando dos orejitas peludas aparecieron entre el enmarañado cabello verdoso.—Orejas.—dijo Shotou señalándolo.

Izuku puso las manos sobre su cabeza y pudo sentir el suave pelaje. Sintió algo que se movía a sus pies y cuando descubrió que también le había salido una cola, casi pierde la cabeza. Para evitar que todo empeorara, Aizawa envió a Izuku a la enfermería, para que Recovery Girl le hiciera un chequeo. Dicho chequeo reveló, como no podía ser de otra manera, que Izuku había sido alcanzado por un Don, esta vez sin que se haya percatado de ello, y fue un alivio para todos descubrir que había pasado en el campus de la escuela. Típico de Izuku Midoriya y su suerte.

Como Chiyo le había recomendado, volvió a su habitación a descansar. Todo se estaba volviendo raro a su alrededor. Más grande, más brillante, más ruidoso, y entre todas esas sensaciones aumentadas se durmió. 

Cuando despertó su transformación estaba completa. Ahora era un gato de pelaje negro con un brillo especial, casi verdoso. Quería salir de allí, miró a la puerta, pero estaba cerrada. Miró a la ventana y estaba abierta. 

Salió y la suave brisa nocturna acarició su pelaje de una forma agradable. Izuku usó sus nuevas habilidades gatunas de forma instintiva, y sigilosamente subió por los balcones hasta llegar a la habitación de Katsuki, la cual también tenía la ventana abierta. Típico de Izuku Midoriya y su suerte.

Con sumo cuidado se recostó al lado del rubio y, ronroneando suavemente, se durmió al lado del chico que tanto le gustaba.