Los intensos rayos de Sol se filtran por las rendijas de las ventanas, yendo directo a los ojos de la joven que comenzaba a despertar a causa de estos y como si fuese un libro, uno por uno de los sucesos ocurridos comenzaron a pasar por su cabeza.
¿Por qué ella? Miles de preguntas sub respuestas y ahora, otra más en laosta de Eun Ji, quien alzó su cabeza ante la entrada de sus padres y un doctor.
— Cariño — madre e hija se funden en un abrazo, siendo el llanto de la mayor la que causara la risa en la joven — Por dios, extrañaba tanto abrazarte.
La menor comenzó a reír producto de aquellas palabras, observando al doctor revisar su cuerpo y luego dirigirse hacia su padre, intentando descifrar lo que hablaban a través de sus expresiones, algo completamente en vano.
Y sin pensarlo, sus labios hicieron una promesa de la cual no se sabía su final.
— Juro verte algún día tras las rejas — sus ojos admiraban hacia la vista que le proporcionaba el ventanal, sin caer en cuenta del enojo de su oración — Pagarás por cada una de las vidas inocentes que te has llevado y las que te quedan en el transcurso de tu vida.
— ¿Cuándo podré irme? — aquel hombre recibió sus palabras más no su mirada.
— Depende de su estado, pero lo más probable es que se pueda retirar mañana — los presentes asintieron despidiéndose del doctor.
— Ya que estamos solos —mencionó observando directo a su padre — Suelten lo que hablaron con él, sé que tuvo que haberles recomendado algo.
— Eun Ji cariño... — su madre se vio interrumpida por la mano de su esposo, quien se dirigió sin titubeos hacia su única hija.
— Te irás con tus abuelos al campo — mencionó llevándose una protesta de la joven — En estos momentos tus palabras serán en vano, hablaremos con ellos hoy y si es posible, mañana mismo te irás con ellos.
— No pienso dejarlos a ustedes en manos de un psicópata, me niego. Él o ella es capaz de matarlos a ustedes sólo por dañarme psicológicamente.
— Ya advertí que tus comentarios serán nulos en este tema, y la decisión está tomada — su cuerpo se retiró dejando ir su furia con la puerta de entrada y llevarse consigo la mirada de ambas mujeres.
— ¿Por qué toman decisiones por mí? — su madre ignoraba cada palabra que salía de sus labios, evitando la mirada de su hija — Soy mayor de edad, sé cuidarme sola y lo único que me importa en estos momentos es protegerlos a ustedes.
— Entiendo que seas adulta, pero no comprendes el dolor que sentimos tu padre y yo al verte en esta situación — confesó recostándose a un lado de la joven, acariciando con parsimonia su cabeza — Eres nuestra única hija, la luz de nuestros ojos, y ver como esa luz será arrebatada de nuestras manos, sería una gran pérdida. Él es capaz de matar por ti cariño.
Pero ninguna de las dos había prestado total atención a esas palabras, porque mientras una lo decía en broma, la más joven sólo negaba pensando en que sería una acción que cualquier padre pensaría.
Y lastimosamente, aquel hombre no sólo lo había pensado, sino que no había realizado sin más.
— Entiendo el punto de vista de ustedes, ¿pero quién me comprende a mí?
— Sé a que te refieres mi niña, pero sólo por esta vez, coopera con nostoros. Pasarás unas semanas en casa de tus abuelos y veremos como avanza la situación.
Su sonrisa se activó en su rostro, posando sus dígitos en la suave mejilla de la contraria, quien aún negaba ante aquella opción.
— Ustedes serán las últimas víctimas — murmuró desviando la vista hacia un punto fijo — Nos están dejando pista sin que nos demos cuenta.
— ¿De qué hablas cariño? — la voz de su madre sonó preocupada, haciendo reír a la menor — Nosotros estaremos bien, no debes de preocuparte.
— Su juego consiste en hacerme perder la cabeza — sus ojos voltearon a buscarla — Su última partida serán ustedes...o mejor dicho, su última jugada seré yo.
[•••]
El sonido de unas botas acercándose al centro de la sala, era una clara señal de que si infierno comenzaría y eso, no era precisamente una buena noticia para el joven que ahora se encontraba atado a una silla, siendo obstruida su vista por un saco.
La pálida mano arrancó sin medir su fuerza el saco que le impedía observar el agrietado rostro del joven debajo suyo, mostrando una gran sonrisa al ver el demacrado estado del contrario.
— Me das lástima en estos instantes — murmuró dejándose caer frente a aquel cuerpo — Jugaste con fuego y te quemaste, es bueno escuchar lo que advierten tus mayores.
El estruendo de su pie impactar contra el pecho del rubio resonó en la oscura habitación.
— Tienes que secuestrarme para poder salvar tu trasero, eres tú él que me da pena — susurró entre sonrisas falsas.
— ¿Secuestro? Pensé que esto era de todo menos un secuestro — susurro dejando mostrar una seña hacia los presentes — ¿Quieres divertirte conmigo?
— ¡Jódete! — escupió en el rostro del agresor, dejando ver una sonrisa de lado — Te vas a podrir en el infierno.
— No lo creo, el diablo no puede ser quemado en su propio infierno — susurró dejando caer su aliento en el rostro contrario — Tendremos que hacerle algo a esa boquita tuya.
Su cuerpo se dejó caer en la punta de la única mesa que adornaba aquel horrendo lugar, sus ojos admiraban la escena frente a él, dejando saborear sus labios ante la situación y analizar las acciones de sus hombres alzando la cabeza del chico.
— Procedan rápido, sus gritos me provocan dolor de cabeza — cerró sus ojos agarrando el puente de su nariz entre sus dedos.
La sangre hacía contraste con sus gritos, mientras la aguja pasaba por los belfos del rubio que ahora se hallaba entre gritos, sus gritos eran música para los oídos del pálido, mientras que la situación, era su escena preferida.
— Ya saben que hacer con él, no dejen rastro de sangre — su cuerpo se alejó del lugar, encontrándose fuera de la habitación a Song Ki — ¿Qué ocurre ahora?
Sus manos retiraron la máscara que ocultaba sus rasgos, analizando la preocupación en su mano derecha.
— No hallamos rastro de la Sra Eun Ji, nuestros hombres no han logrado localizarla.
— Destrúyela, ya no me sirve — dejó caer el objeto en la mano contraria para cruzar sus brazos — Les doy 24 horas para que la encuentren, no quiero tener que castigarlos.
" Nuestra pequeña EunJi está jugando a las escondidas, nuestro juego ya se ha vuelto aburrido"
Ok...ni idea de que decir...😐
Espero les guste mucho, ya se acercan capítulos bastantes interesantes (en mi opinión 😅)
Chaooo🤗🤗
🐛🐛🐛
28/09/22 – Editado
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▪Who Is The Killer ?▪MYG ✔ [EDITANDO]
Action¡Esta historia está siendo editada! " GAME OVER " era su última frase antes de cometer tales actos. " GAME OVER " fue la última frase que escuchó en su vida... ▪Hermosa portada hecha por: @Dana04books 😍 ▪Mención especial en el Concurso Vincent Awar...