Capítulo 4.

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Capítulo cuatro: Nada especial.





Pero y si fue cierto.. ¿Porque jamas me escribió como prometió?. De ser verdad lo que dice Jace, ¿porque dejo que el recuerdo de muestra amistad se esfumara con los años y me hiciera crecer creyendo que no había nada bueno sobre él que recordar?
Justo ahora me doy cuenta de que he pasado los años ignorando todo dentro mi cabeza, haciéndolo a un lado y viviendo al margen de la realidad, empezando por la futura boda y lo que eso me traerá después.

Intento no demostrar demasiado lo asustada que me siento al enfrentar todo aquello en el interior de este auto, y en compañía de dos chicos que siguen hablando de cosas triviales entre amigos. Para este momento ambos discuten sobre que canción debemos escuchar.

—Debemos dejar de tocar covers y enfocarnos en algo original. Ya sabes, comenzar a buscar nuestro propio estilo e ir labrando nuestra marca en la música.

—Supongo que si, pero mientras no tengamos nada terminado sera mejor seguir practicando lo que ya sabemos.

La respuesta de Noah me confunde, y tengo que romper mis pensamientos para enfocarme al cien en su conversación.

—Carter piensa que tu no te tomas esto en serio, que no te interesa llevar esta banda a los grandes escenarios.

—Es un imbécil. —repsondio Noah— Hago lo que puedo y lo sabe. Pero en este pueblo no hay muchas oportunidades, sobretodo aquellas que nos abran la puerta que necesitamos.

—Si, se lo dije, pero tienes razón, es un imbécil que no sabe esperar.

—Esta noche hablaremos y pensaremos en algo para llamar mas la atención.

Lo que resta de camino ambos se sumen en sus pensamientos, y lo único que se escucha es la musica que sigue sonando y llenando el silencio.

Diez minutos después por fin llegamos, Jace avanza unos metros mas, por un angosto camino de piedra que conduce a lo que a primera vista me parece una amplia cochera, cuyas puertas de madera están cerradas.
Apaga el motor y ambos salen del auto. A través de la ventana puedo ver a Noah abriendo la puerta trasera y posteriormente invitandome a que salga. Lo hago y apenas me plantó frente a él le sonrió.

—Gracias. —su respuesta fue una media sonrisa que marco uno de sus hoyuelos.

—¡Dense prisa y dejen los coqueteos para después!. —exclamo Jace, abriendo la puerta de la cochera.

Noah rodó los ojos.

—Vamos Sarah. —me dijo y acto seguido se giro para seguir a su amigo, quien ya se había perdió en el interior.

Me encamine por detrás suyo, hasta atravesar el quicio. Dentro era mas o menos lo que imaginaba, un espacio medio vacío con muebles viejos que servían como una especie de sala improvisada donde se encontraban sentados otros tres chicos y una chica, cuya mirada se clavo en mi apenas me termine de acercar.
Opte por no prestarle demasiada atención y en cambio seguí paseando mis ojos por el resto del espacio, hacia la gigantesca batería que hay en el lado izquierdo. A su lado también había un teclado eléctrico y un par de bases que sostienen a dos guitarras eléctricas. Fuera de eso no hay mas que llame la atención por lo que no me queda mas remedió que volver la vista al grupo de desconocidos.

—..Tardaron demasiado.

—Culpa de Griffin. Casi tuve que sacarlo a rastras de su nueva casa.

—Te sentó bien tu nuevo empleó eh.

—Callate Carter, que de no ser por tu brillante idea yo no estaría metido en tantos líos.

Así que el autor de la apuesta fue Carter, un chico de cabello rubio y ojos azules y burlescos.

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