Tu me complementas [SORA x SKEI]

Capitulo 10: Te veo partir

La hora se acercaba, los vuelos despegarían. La historia acabaría.
Cada uno fue por su lado, a pesar de estar en el mismo aeropuerto.

Se encontraron los dos por sólo unos segundos en los cuales, Sorato lo ignoró por completo mientras que Skei, se quedaba en blanco. Quería disculparse por vez número treinta con su amigo pero al notar el temperamento frío del contrario, se quedó callado.

Rizel, que actuaba como mediadora entre ambos, decidió ir por el de lado de Skei. Lo abrazó fuertemente consolándolo.

— Hice lo que pude. Le dije que lo amabas. Le dije que lo sentías pero él , solo tomó sus cosas y comenzó a ignorarme. Lo lamento tanto.

Exclamó Rizel tratando de controlar la caída de sus lágrimas. Era una escena muy, muy triste y muy sentimental.
Decidieron quedarse abrazados por unos instantes y entonces, Skei tomó valor de donde no tenía y secó sus lágrimas.

— Suficiente. Debo hablar con él . Debo decirle en persona como me siento.

Exclamó Skei tirando sus bolsos corriendo hacia el otro ala del Aeropuerto tratando de encontrarlo.

— ¿Dónde está? No lo veo.

Grito Skei estando agitado por haber corrido de una punta a la otra.
Su amiga Rizel , lo siguió y notó cómo entraba a la cabina para ya entrar al avión.

— Ahí está. ¡Sorato!

Grito repetidas veces pero al ver que no le respondía, llenó sus pulmones de aire gritándole fuertemente.

— ¡SORATOOOOOOO!

Los gritos de la chica resonaron en todo el aeropuerto e hicieron que Sora, deba salir.

— ¿Qué sucede? ¿Todo está bien?

Sorato los miro con una expresión de confusión.

— Tu turno.

Exclamó Rizel alejándose de Skei para que ambos pudieran hablar.

— Te amo... No es el momento pero, quédate conmigo. Estoy muy enamorado de ti. Por favor no te vayas.

Exclamó Skei.

— Dios mío...

Respondió Sora viéndolo a los ojos sin poder creer lo que decía.

— Lo se, lo se. No debí esperar hasta último momento para decirlo pero, no tenía opción. Fue tan estupido pero, te lo digo ahora...
Te amo, no te vayas ahora. No subas a ese avión.

Exclamó Skei sintiendo cómo las azafatas le preguntaban una y otra vez si subiría al avión.
Su rostro se volvió algo triste y noto como Sora , daba la vuelta entrando a la cabina.

— Lo siento...

Respondió entrando dejando a su amigo, completamente partido al medio con el corazón en sus manos. El cual, le entregaría a él .