Empecé el show con "All around the world", y decir que salió pésimo es quedarse corto. Mi voz sonaba ronca y los pasos me salían descordinados. Creo que ni siquiera podría llamarle baile a eso. Pero aún así, ellos parecían estar muy emocionados y contentos.
La verdad es que me sentía horrible y a veces tenía que parar porque sentía que no podía respirar.
Después de algunas pocas canciones, en la mitad de una comencé a sentirme realmente mal. Empecé a sentir mareos y nauseas de nuevo. Paré de cantar y salí del escenario para llegar al baño más cercano, dónde volví a vomitar.
El DJ los distrajo un rato con música para que yo pueda recomponerme. Luego de eso, volví sintiéndome un poco mejor, pero aún así me sentía mareado.
No se dieron cuenta que no me había cambiado, pensaban que todo seguía normal, pero no era así. Canté dos canciones más y sentía que no podía más. Me retiré nuevamente del escenario, para encontrarme con Scooter. Él me dio una mirada de reproche y avanzó hacia mi.
- No dejaré que sigas con esto.
Me faltaba el aire y no podía si quiera mirarlo. Jadeaba y me tambaleaba de un lado a otro mientras trataba de agarrarme de alguna columna. Ya no podía más, iba a rendirme. Divisé una pequeña silla en la cual después de unos minutos de intento, logré sentarme, y desde allí solté un bufido mientras trataba de observar a Scooter.
Miles de chicos quedarían destrozados, y si se enteraran la razón por la cuál no habría terminado el concierto, no me perdonarían nunca. La intensidad de los gritos y ver el correr del tiempo en el reloj , aumentaron mis nervios y no podía pensar en nada. Sólo quería complacerlos y hacerlos felices.
Scooter se puso en cuclillas frente a mi
- Tranquilo, avisaré que lo cancelaras y alguien saldrá a avisarle a la gente.
- No, quiero ser yo quién salga a hablar con ellos. Aunque no me entiendan, dile a Hugo que les traduzca. - le ordené y con pereza me levanté de mi asiento.
Después de explicarles lo que había pasado conmigo y que Hugo se los traduzca, bajé del escenario. Tuve que decirles que tenía una intoxicación alimentaria intravenosa, que en parte era cierto, solo que no fue alimentaria...
Me sentía muy mal por mentirles, pero me hubiese sentido peor si les decía la otra versión. Estaba casi arrepentido y casi vuelvo al escenario a decir que todo era broma, que estaba en perfectas condiciones para cantar, y que inclusive podía cantar más que otras veces. Pero ya estaba hecho, si seguía no iba a durar mucho sin antes derrumbarme en el piso. No podía hacer nada. Había cancelado el concierto.