ONE MONTH WITH YOU II

🥂Confesión Borracha🥂

Mundo: omegaverse/universidad au
Skin: karmaland

En la calle se escuchaba los carros ir y venir, el azabache iba por el andén, con la capucha en la cabeza y las manos en el bolsillo. Iba a un paso rápido, un poco molesto con su amigo pero que más podía hacer.

Siguió caminando hasta la entrada de aquel lugar, mandó un mensaje diciendo que ya estaba afuera del lugar, dos peliblanco salieron poco después, detrás de ellos un pelinegro y otro castaño. - ¡willy! - el pelinegro llamó a uno de los peliblancos que ayudaba al otro a caminar sin tropezar.

- mira rub, ahí esta tu novio - el nombrado se sonrojo mientras se acercaba para ahora ser el que  le ayudaba a sostenerse al otro.

- no es mi novio guille - el peliblanco teñido hizo un puchero - solo somos compañeros y buenos amigos.

- claro, solamente se ayudan en los celos, vienen por el otro cuando están ebrios, se preocupan el uno al otro y a veces duermen juntos - se burló mientras el resto lo esperaba.

Rubius se acercó al oído de azabache - Sam~ vamos a casa~ - el nombrado se tensó y luego asintió. Se despidió de sus amigos y dieron la vuelta para volver por donde antes habia pasado vegetta.

Caminaron unas cuantas cuadras a tropezones hasta llegar al edificio donde habían alquilado un apartamento, subieron por el ascensor y cuando el pelinegro tuvo que abrir la puerta soltó unos segundos al más alto el cual dio un paso y cayó sobre el omega pero apoyándose con las manos. - rubius, hueles a alcohol, levanta. 

- no quiero - vege soltó un suspiro - te ves mas lindo que otras noches~  - apenas y podía entenderle así que se sonrojo y trato de apartar al otro pero este no se dejo y llevo una mano a la mejilla del omega.

Este tuvo suficiente, con las piernas impulso el cuerpo del teñido y lo aparto de encima - no sabes lo que dices o haces, estas ebrio - el otro se levantó como pudo y avanzo hasta el pero por suerte ya habia abierto la puerta - ve date un baño.

- ¿por qu-que no aceptas mis se-sentimientos? - el alfa comenzó a llorar, mientras entraba.

- estas borracho Rubén, no sabes lo que estas diciendo - se cruzó de brazos mientras se sonrojaba más, el tenia sentimientos por el teñido desde hace un tiempo pero nunca se atrevió a decirle por que sabia de las preferencias del alfa, omegas mujeres con buenas curvas.

El no estaba tan mal, no era mujer pero tenia un cuerpo envidiable - si se lo qu-que digo - hizo un puchero - me gustas.

Antes de que pudiera dejar al borracho en la sala he irse a dormir fue detenido y al darse la vuelta lo recibieron los labios de rub, besándolo y aunque en un principio pensó en alejarse correspondió luego de unos segundos, eran movimientos torpes  pero que demostraban que lo que decía era verdad.

Al separarse rub guio al otro al sofá que tenían - mañana te arrepentirás de esto y traerás a una de tus "novias" - declaro el azabache ya acostumbrado a eso, luego de un celo el alfa se encerraba en la habitación con alguna omega y no quería ni recordar lo que habia escuchado, realmente le bajaba un poco los ánimos.

- no qui-quiero a otro omega que no se-seas tu - intento acercase pero fue detenido - no importa si estoy ebrio~ te veo igual.

-¿que coño esta pasando aquí? - el otro acompañante del apartamento, un chico de segundo semestre, un poco bajo para su edad pero bastante inteligente, aunque no estuviera la mayoría del tiempo en ese apartamento también vivía ahí. - son las jodidas 3 de la mañana.

- Rubius esta diciendo incoherencias y no me deja ir - se quejo el ojivioleta pero el otro ni se inmuto.

A cambio el alfa no lo dejo mover -¿por que no me crees? - le hizo ojitos pero al ver como el otro lo ignoraba lo tomo de las mejillas y obligó que lo viera - ¡me gu-gustas!.. no ¡me encantas!

ambos estaban sonrojados el menor en la sala carraspeo incomodo - dicen que los borrachos siempre dicen la verdad - se acercó para empujar a rubius para que Sam se levantara - también dicen que les da coraje.

- no le voy a creer alexby - frunció el ceño para ver como el alfa se quedaba recostado en el asiento, soltó un suspiro y volvió a acercarse para levantarlo y dejarlo en la habitación con ayuda del ojiazul.

- vege, ya te digo yo que dice la verdad, deberías hablar con el cuando este sobrio. - lo dejaron en la cama, le quitaron los zapatos y luego cerraron la puerta.

- lo pensare... - suspiro un poco cansado - será mejor que vayas a dormir, muy pocas veces podemos descansar así.

el otro asintió no muy seguro y se encerró en su propia habitación, el otro apagó las luces y fue a su propia habitación, su gatita lo recibió en la cama, no tuvo más remedio que acostarse he intentar dormir pensando en la declaración para nada romántica del noruego... 

No dejaría que sus amigos lo arrastraran a emborracharse si siempre que fuera a recogerlo tendría una confesión así.