💀Compañero De Crimen💀

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Skin: karmaland
Mundo: omegaverse

Ambos estaban un poco nerviosos, tenían el plan solo faltaba ponerlo en práctica y rezarle a los dioses oscuros que todo saliera bien. El azabache suspiro mirando la puerta de su casa, arriba lo estaba esperando Akira, su prometida, al lado de él estaba rubius, su amante y si se podría decir, novio.

Ambos se dieron una última mirada antes de avanzar, subieron las escaleras y el híbrido de oso se quedó unos pasos atrás, abrió la puerta y vio la casa iluminada, comenzó a caminar y antes de abrir la puerta soltó todo el aire, lo recuperó y entró. - Akira ya llegué - la nombrada salió de la cocina con una sonrisa.

- ¿Cómo te fue hoy cariño? - Akira era una alfa de buen porte, había conquistado su corazón o eso creyó hasta que conoció mejor a rubius y este si supo cómo hacerlo sonreír y sonrojar hasta con el más mínimo detalle.

- me duele todo~ - se quejó - pero tengo algo que mostrarte - se acercó para tomarla de las manos, se paro en una parte de la alfombra y activo el ascensor bajando directamente al bunker secreto que había construido con el oso.

- ¿Qué es todo esto mi niño? - el omega sintió una punzada en su corazón pero aún así siguió hasta llegar a la pequeña casa y luego bajar hasta una parte que no estaba bien construida aún.

- un bunker, se rumora que habrá algo fuerte y tenemos que estar preparados - miró hacia atrás y vio al teñido acercarse con la espada - además cada uno tiene un cuarto.

- no sabía que estabas trabajando en esto - al darse vuelta pudo ver la mirada ensombrecida de Sam y atrás de él una figura mucho más imponente - veg cuidado.

Pero este no hizo nada, a cambio se le escucho una pequeña risilla - ¿sabes? Este pueblo es perfecto... Pero lo único malo es que si escoges una pareja es de por vida.

El terror se plantó en los ojos lila de la rubia cuando vio como Sam retrocedía y le daba paso libre al alfa híbrido - hay más maneras de solucionar esto veg...

- no le digas así - paso la mirada del omega al teñido - el ya tomó su decisión.

Alzó la espada y de un solo golpe fue suficiente para que el lila pasara a un gris rápidamente y del blanco del vestido pasará aún rojo poco a poco, Sam le dio una última mirada antes de acercarse al cuerpo y cerrarle los ojos pero con una pequeña sonrisa de por medio, ambos sabían que habían más métodos pero querían un poco de sádica diversión.

Ambos llevaron el cuerpo sin que regara sangre hasta arriba, a la entrada de la Casita del bunker, fueron hasta la entrada de agua y dejaron que la corriente y los tiburones se llevarán el cuerpo hacia el otro lado de la costa, en lo mas profundo y recóndito del mar.

- solo falta una más... - ambos se miraron, Sam tomó la espada en manos de Rub y la limpio - no quiero que alguien te vea con eso.

- no demorare, cuando la traiga será más fácil - nieves era un poco tontita que de costumbre, una gamma que había sido comprometida con Rub en otro pueblo, al comienzo había sido bien pero luego se volvió aburridor y monótono, además la mujer siempre le reclama cosas y el ya estaba cansado... A cambio ese omega... Vege era como un dios para el.

Era inteligente, fuerte, atractivo y sobre todo nada aburridor siempre había algo que hacer y eso le gustaba además de ser lindo y dulce con el, había robado y atrapado a su corazón y sin importar el que, estaría con él.

Sam le dio un último beso antes de que se fuera por la gamma, el plan era sencillo, lo mismo que con Akira pero está vez lo haría el y le tenía cierto rencor... Siempre fue tan molesta y acaramelada que le daban celos y aunque sabía que debía dar un golpe certero le encantaría sacar toda esa ira.

Se sentó a un lado de la puerta del bunker y miró su reflejo, tenía una mancha en la mejilla roja, supuso que era sangre así que extendió el brazo hasta el agua y se limpió.

Tal vez había pasado una hora o dos cuando escucho la primera puerta del bunker ser abierta, se levantó por inercia y sonrió al ver pasar a rubius con nieves, esta última casi que encima del alfa, camino detrás de ellos y cuando llegaron al mismo lugar, la gamma se agacho para mirar mejor la sangre había ahí pero grito cuando vio como rubius sonreía y vegetta Movía tan rápidamente la espada y de una manera tan limpia...

Comenzó a salir sangre pero aún no estaba muerta, no del todo. Con las pocas fuerzas que le quedaban abrió los ojos para encontrarse con la imagen de rubius, su prometido, besando apasionadamente a vegetta mientras este se dejaba sin ninguna excusa, lloró y cuando murió aún soltaba algunas lágrimas.

Ninguno se conmociono, no había por qué, llevaban un mes entero planeando todo, asegurándose que sus compañeros no se acercaran por ninguna razón y ahora... Ahora solo tenían que fingir que habían desaparecido juntas, como si ellas fueran las amantes y los hubieran dejado.

Al igual que con Akira, se la dieron a los tiburones y luego comenzaron a limpiar todo, no dejaron rastro y la espada la echaron a la lava. - tu turno mi amol - vege sonrió y ambos subieron a la casa, se cambiaron y se deshicieron de la ropa, dejándola en la guarida de lobo nocturno y luego cambiándose.

Sam respiro y luego llamó a alex, cuando le contesto miró a rub y comenzó - ¿vegetta?

- Alex - comenzó a fingir que lloraba y estuviera preocupado - ¿ha-haz visto a Akira?

- no, no a venido - al escuchar así al omega se comenzó a preocupar. - ¿no está contigo?

- n-no - comenzó a llorar - sus cosas no están a-además llame a rubius y-y nieves tampoco es-esta.

- mandare a alguien para que las busque aun que hay algo que tienes que saber, se que rubius esta contigo así que iré para haya - colgó.

- viene para acá - rubius asintió, se prepararon, ellos ya sabían del engaño, Akira pasó un celo con nieves y nunca lo dijeron, en parte esa era su venganza.

Luego de unos minutos ahí estaba Alex, sobando la espalda del omega que "lloraba" desgarradoramente, ya les había contado, rubius estaba callado, algunos oficiales revisaban toda la isla sin encontrar nada, habían desaparecido y así lo tomaron.

Como si hubieran huido, rubius se quedó con vegetta luego de eso, nunca dudaron de su palabra... Aunque si era raro que a los pocos meses ya hubieran anunciado su compromiso. Eran inteligentes, habían cometido un crimen juntos, si los descubrían se hundirían juntos pero mientras tanto vivirían juntos ese amor que se fortaleció gracias al mismo crimen...

¿Hasta donde llega la gente por amor?

ONE MONTH WITH YOU IIWhere stories live. Discover now