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Wang Yibo es un chico dulce y risueño, pero solo con las personas cercanas a él, en este caso hablamos de sus hermanos y padres.

Con las personas extrañas, el castaño es demasiado serio, frío por la forma en que te miraba y demasiado callado.

Las personas suelen tratar de acercarse, para poder tocar aquellos cachetes regordetes y apetecibles, que invitan a morder y pellizcar;  pero solo basta que te mire con esos ojos agudos y fríos para que salgan huyendo, declinando completamente a la sola idea de siquiera mirarlos. 

El castaño es el menor de tres hermanos, actualmente es un estudiante de ingeniería de 25 años, cursando su último año; próximamente graduado y desea seguir con una tradición olvidada en su familia.

Wang Yibo con los conocimientos requeridos desea construir un restaurante y ya había encontrado un lugar en Yiling, pero solo tendría que convencer a la pareja dueña del lugar para que puedan venderle el terreno, pues no era el único interesado en dicho espacio.

Su propósito era construir un lugar en donde todos puedan seguir disfrutando del secreto mejor guardado de la familia, "sopa de costilla de cerdo con raíz de loto"

Antiguamente la familia tenían un local pequeño en donde se distribuía la comida, pero al ver que no se daban abasto con el verdadero negocio familiar, el cual consistía en administrar un corporativo muy importante en toda Asia, decidieron solo enseñar la receta y esperar a que un heredero se dignara a seguir con la tradición olvidada. 

Aquella receta fue pasada de generación en generación, y era ley en la familia que siempre alguien debía hacerse cargo de la receta y en esta ocasión la oportunidad se le presentó al castaño.

«6:00 am de un viernes cualquiera»

*Parque de la residencia Wang:

-¡Wang Laoshi, esperame!. -gritaba Chen Feiyu-.

-¡Utiliza esas piernas largas que tienes, no pienso detenerme!. -grito el castaño-.

-jadeando-. Eres un idiota completo, te dije que me esperes porque necesitaba hablar contigo para confirmar tu asistencia. ¡Como rayos puedes correr todos los días y no cansarte!. -tratando de regular su respiración y tratando de seguir su ritmo-.

-Asunto Feiyu, estás retrasando mi rutina. Manzanita corre más rápido que tú. -mirando a la perrita que meneaba la colita-.

-rodando los ojos-. ¿Olvidaste que hoy es mi cumpleaños verdad?

-deteniendo su andar-. No lo olvide. A qué hora debo ir. -habló tranquilamente-.

-Sabía que no lo olvidarás. -sonriendo-. Es a las 8:00 pm en el bar "Recovecos Clouds". No lo olvides y no llegues tarde.

-¿Por qué?. Si las fiestas generalmente empiezan a las 12:00 am.

-Tú nada más llega a esa hora, creeme Yibo te va interesar mucho llegar a esa hora. Adiós. 

Chen Feiyu se fue en otra dirección dejando al castaño pensando.

Había recordado en ese instante que tenía una reunión familiar para presentar a su prometido formalmente y solo necesitaba de una excusa, pero como si la suerte estuviera de su lado, la oportunidad llegó.

Wang Yibo odiaba la sola idea de casarse con un desconocido, y peor aún con un mocoso mimado del cual escucho muy malas referencias. 

Todos decían que el heredero Xiao era demasiado travieso y coqueteaba descaradamente con todos; hasta el perro caía ante sus pucheros tiernos.

Encuentros del DestinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora